Apenas 20 horas después de que fueran puestos en las playas de El Batao (Cabo Verde) unos 700 huevos de tortugas bobas, volvieron a ser depositados en cuatro nidos de la playa de Cofete. Todo ello, en el marco del proyecto de reintroducción de la cría de tortugas en Fuerteventura, que vine desarrollando el Cabildo majorero, el Gobierno de Canarias, la ULPGC y el Centro Superior de Investigaciones Científicas, en colaboración con el Gobierno de Cabo Verde.

El proceso fue seguido por un grupo de vecinos y voluntarios del proyecto, junto al vicepresidente primero del Cabildo, Guillermo Concepción; la consejera de Medio Ambiente, Natalia Évora; el director general del Medio Natural, Francisco Martín; y el concejal de Medio Ambiente de Pájara, Farés Sosa. Previamente a la llegada de los huevos se realizó una suelta de tres tortugas por parte de voluntarios y colaboradores.

Los 700 huevos, fueron enterrados a 40 centímetros de profundidad en varios nidos por el equipo de biólogos de la ULPGC que supervisan el proyecto, imitando el proceso que siguen las tortugas en la naturaleza.

El periodo de gestación de los embriones de tortuga se puede llegar a extender entre 40 y 70 días, dependiendo de las condiciones de temperatura y humedad en que se encuentren. Esta quinta experiencia es, de entre las llevadas a cabo hasta ahora, en la que con mayor prontitud se han traslado los huevos, explicaban los biólogos del proyecto que para evitar que el frío pudiera afectar al desarrollo de los mismos. Tras la eclosión las crías serán trasladadas a la Guardería Tortugas, en Morro.