La nueva Residencia de Discapacitados del Cabildo majorero contará con 15 usuarios, que se trasladará a ella a partir de la segunda quincena de julio, una vez finalicen el proceso de adaptación en el que se encuentran inmersos desde mayo. De esta manera, pasarán a estar ocupadas 15 de las 30 plazas residenciales con las que cuenta el edificio. La Residencia tiene capacidad además para ocho plazas de estancia diurna, que se convertirán en diez en lo que queda de año.