Canarias se encuentra desde hoy martes de nuevo en alerta por vientos. Las islas vuelven a estar bajo el influjo de una extensa borrasca emplazada al oeste de Madeira y que, entre otras cosas, amenaza con dejar, de un lado, fuertes rachas de viento en las islas orientales y en cumbres de Gran Canaria y, del otro, precipitaciones que, con carácter débil y moderado, empaparán la práctica totalidad del Archipiélago, a excepción de Lanzarote y Fuerteventura.

La nueva alerta decretada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la cuarta del año por este fenómeno meteorológico, entrará en vigor a partir de este mediodía, dejándose notar en La Palma, La Gomera, El Hierro y las zonas cumbreras de Tenerife y Gran Canaria. En principio, se prolongaría como mínimo hasta la jornada de mañana, cuando se podrían llegar a agravar incluso las condiciones adversas, según la estimación hecha ayer tarde a este medio por el jefe regional de Predicción de la Aemet, Jesús Agüera.

En concreto, será en el centro de Tenerife donde las rachas puedan causar mayores estragos, pues para el ámbito geográfico de La Orotava y Vilaflor se ha decretado la alerta naranja -con rachas de hasta 90 kilómetros por hora- cuando en el resto de las zonas amenazadas en la Comunidad el anemómetro podría marcar los 75 kilómetros, lo que se traduce en una declaración de alerta con nivel amarillo. Esta misma nominación, la de la alerta amarilla, se agregó a última hora de anoche a la costa norte tinerfeña