El retraso del Cabildo de Gran Canaria en el pago a Global de una deuda de 12 millones de euros "pone en peligro la estabilidad financiera" de la empresa y, en consecuencia, de todo el sistema insular de transportes. Ángel Luis Sánchez Bolaños, director general de Global, lanzó ayer esta advertencia al grupo de gobierno de la corporación, que después de 35 meses en el cargo aún no ha sido capaz de abonar las ayudas al viajero correspondientes al periodo 2004-2007, la etapa en que gobernó el Partido Popular (PP).

Sánchez Bolaños señaló que el impago de esa deuda está generando a Global unos gastos financieros de un millón de euros al año, lo que pone a esta sociedad laboral en una situación "insostenible". La demora, explicó, se debe a que el Servicio de Intervención del Cabildo está impidiendo el abono de esa cantidad porque "confunde" el Contrato-Programa para subvencionar el transporte público por carretera con las ayudas al viajero a través de bonos y descuentos.

El representante de Global recordó que el problema se remonta a la anterior etapa del PP, que sólo en 2007, al final de su mandato, reconoció la deuda de los cuatro años anteriores. Aunque "sin mala fe", aseguró Sánchez Bolaños, el anterior equipo de gobierno, presidido por José Manuel Soria, utilizó una forma de pago "equivocada", lo que ahora da pie a las distintas interpretaciones entre las partes.

Así, todos los grupos políticos del Cabildo reconocen la deuda con Global y han mostrado su disposición a llevar a un Pleno la aprobación de dicho pago. Sin embargo, ese deseo de saldar las deudas antiguas choca con el bloqueo del Servicio de Intervención, que considera que hay que descontar los beneficios que obtuvo Global por la aplicación del Contrato-Programa.

"El actual grupo de gobierno está cumpliendo a rajatabla con el abono de las ayudas al viajero desde 2008 hasta ahora, por lo que no entendemos por qué el interventor considera que los pagos de ahora son correctos y los de 2004-2007 son incorrectos", apuntó.

Aunque exculpó al presidente y a los consejeros del Cabildo, el director de Global les emplazó a buscar "una solución urgente" y les advirtió de que la empresa no aceptará la propuesta de reducir esa deuda a 9,3 millones, tal como ha planteado la Autoridad Única del Transporte. "Queremos cobrar hasta el último céntimo", recalcó.

Fuentes del grupo de gobierno confirmaron que el retraso en el pago se debe "exclusivamente" a la negativa de la Intervención y señalaron que la Autoridad Única cuantifica la deuda en 9,3 millones de euros, pues en los 12 millones que reclama Global se están incluyendo los intereses bancarios. El Cabildo ha encargado un informe jurídico y confía en que ese dictamen resuelva las diferencias con la Intervención.