"Canarias necesita una segunda transición política, con la descentralización en cabildos y ayuntamientos". El presidente de la institución insular, José Miguel Bravo de Laguna, insistió ayer durante la entrega de honores y distinciones de Gran Canaria en reclamar un "exquisito equilibrio" y de "capitalidad compartida" en el Archipiélago en este cambio de ciclo, en el que pretende dejar aparcada la imagen de un "Cabildo mudo".
José Miguel Bravo de Laguna manifestó en su discurso institucional que Gran Canaria conmemora tres fechas muy simbólicas en su historia. Por un lado, los 200 años de la primera constitución Española, aprobada en Cádiz. En segundo lugar, el centenario de la aprobación de los cabildos. Y, en este apartado tuvo una mención especial para el entonces presidente del Gobierno de España, José Canalejas, para el que pedirá que los siete cabildos le concedan el título de hijo adoptivo bajo el mérito de su "inequívoca visión clara de Canarias". Y, por último, los 50 años de la actividad turística en Maspalomas.
El presidente tuvo una mención especial para cada uno de los premiados, de los que resaltó el protagonismo de Gordillo en las Cortes de Cádiz, de la persona que se enamora de nuestra tierra en el caso de James Krüss, de la proyección artística mundial de Manuel Millares, la aportación artística de la Escuela Luján Pérez, la labor científica y académica de la economista Beatriz González, la solidaridad de Aprosu, la defensa de "nuestro REF" (Régimen Económico y Fiscal) de Salvador Miranda, el ídolo deportivo que fue para muchos niños Germán Dévora, la "magistral artesanía" de María Guerra, el pionero del turismo de calidad Estanislao Mañaricúa y la encomiable labor de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR).
Patriotismo
El presidente del Cabildo se dirigió luego al pueblo grancanario para manifestarle su "objetivo irrenunciable de luchar por Gran Canaria", y cumplir con su papel de ser "el gobierno de la Isla", ya que dijo que no va a aceptar lecciones de canariedad, solidaridad y patriotismo.
En este sentido, Bravo de Laguna expresó su disposición a combatir "tratos discriminatorios o injustos" para Gran Canaria, y más aún cuando es la que "proporcionalmente más aporta con sus impuestos".
En estos dardos hacia la Comunidad Autónoma, el presidente reclamó una segunda transición política en Canarias, con la "efectiva descentralización en cabildos y ayuntamientos, según puso de manifiesto anoche en el teatro Cuyás. José Miguel Bravo de Laguna dijo que en ningún caso iban a encontrarse ahora un Cabildo "mudo" en la necesidad de aplicar reformar administrativas que la hagan menos burocrática, y más rápida y cercana a la realidad social y geográfica. "Cuando Gran Canaria se pone en marcha nada ni nadie la detendrá", añadió.
