Eustasio López González, presidente del grupo Lopesan, ha dirigido una carta al presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, para que evite el derribo del hotel Maspalomas Oasis, de la cadena Riu. El grupo mallorquín quiere llevar a cabo la demolición en abril de 2013. Lopesan destaca que le corresponde al Cabildo, bien de oficio o a instancia de un particular, tramitar el expediente para declarar Bien de Interés Cultural el edificio que se encuentra en su ámbito insular, para que el hotel construido en 1968 quede protegido y se evite el derribo, aunque proceda a la rehabilitación. Esta misma misiva la trasladó también al presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, en tanto que entiende que también la Comunidad autónoma puede incoar un expediente para declarar de interés cultural el hotel Oasis, siempre que se le hubiera requerido al Cabildo y no fuera resuelto en el plazo de dos meses.

Asimismo, el presidente de Lopesan explica que, una vez incoado el expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural, el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana deberá suspender el proceso de otorgamiento de la licencia de intervención en el inmueble y en su entorno. Además, comenta que mientras se tramita la protección del inmueble, Riu sólo podrá realizar aquellas obras que se consideran de fuerza mayor para la conservación del recinto. En este momento, la cadena Riu ya ha solicitado en el departamento de Urbanismo de San Bartolomé de Tirajana la licencia de construcción del nuevo hotel.

Eustasio López, que se alinea con la postura de Alejandro del Castillo, de la Asociación Económica de Amigos del País, así como de la Escuela Superior de Arquitectura, que han defendido la preservación del emblemático inmueble, también remitió el escrito a los presidentes de las asociaciones empresariales, al Círculo de Empresarios y a la Demarcación de Gran Canaria del Colegio de Arquitectos. Este empresario turístico confiesa que decidió expresar públicamente su opinión sobre el derribo del Oasis, aun a sabiendas de que se pueden interpretar como una defensa al hotel que tiene junto a El Palmeral, a raíz de la "frustración" que le produjo oír las palabras de José Miguel Bravo de Laguna apoyando el proyecto de la cadena Riu.

"El hotel Oasis es al Sur lo que el hotel Santa Catalina a la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Ambos deben ser urgente y profundamente renovados, y adaptados a las exigencias de los clientes, pero nunca demolidos", sentencia el presidente de Lopesan. Tras dejar clara su postura a favor de la rehabilitación del establecimiento, y pedir a la cadena mallorquina que "la haga pronto y bien", aprovecha para decir que el hotel "no es el paradigma de la obsolescencia y decrepitud". En este sentido, reta a Riu a que, si tiene "tanto interés en demoler para implantar productos alojativos más acordes con los tiempos, "tire los complejos que tiene en Meloneras, que se conocen en el sector 'como hoteles de VPO' por la pobreza de sus materiales y el bajo coste de sus proyectos anodinos".

Zona verde pública

A juicio de Eustasio López "la sinrazón" de la empresa propietaria solo se explica por la nula sensibilidad que tiene por el interés de Gran Canaria ya que las decisiones como el derribo del Oasis se toman desde la sede balear, y que según insistió, aún se puede evitar.

Con todo, el presidente de Lopesan llama la atención sobre que el hotel, de cinco estrellas, es uno de los mejor situados respecto a la playa de Maspalomas, y además, señala cómo el promotor y los arquitectos supieron respetar el entorno, de tal forma que prefirieron limitar la altura para no restar protagonismo a El Palmeral. Sin embargo, advierte cómo la edificación actual de Riu es fruto de una infracción urbanística ya que se construyó sobre unos 26.435 metros cuadrados sobre zonas verdes públicas. A este respecto, señala cómo una sentencia del Tribunal Supremo de 1978 ordenó la demolición de las obras de ampliación y en 1983 la Comisión Provincial de Urbanismo decidió mantener la edificación para no poner en peligro los empleos.