Una deuda de 24 millones de euros del Cabildo de Gran Canaria que arrastra del contrato-programa del quinquenio 2008-2012 asfixia a la compañía de transportes Global. Los trabajadores mantienen el aviso de huelga a partir del 24 de octubre por los impagos de nóminas y el temor a una congelación salarial durante la próxima década, mientras la empresa trata de alcanzar un acuerdo con la Consejería insular de Transportes para garantizar su viabilidad.

La falta de liquidez vuelve a pasar factura a la sociedad resultante de la fusión de Salcai y Utinsa. Las empresa tiene pendiente de ingresar unos 24 millones que debía percibir del Cabildo, según los representantes sindicales, por la prestación del servicio público entre los años 2008 y 2012, mientras se agotan los créditos bancarios.

Una representación de los trabajadores y la empresa mantuvo ayer un encuentro con la consejera insular de Transportes, María del Carmen Rosario, para tratar de encontrar una salida. Y la reunión concluyó, según los trabajadores, sin garantías, por lo cual mantienen el aviso de paros.

"No vamos a sufragar nosotros el transportes en Gran Canaria", manifestó un portavoz del comité de huelga, formado por los sindicatos FSC-CC OO, UGT, Intersindical Canaria, CATT y ATG, tras la reunión tripartita, que se saldó sin un acuerdo.

Congelación salarial

El colectivo recalca que la compañía tiene pendiente de saldar con ellos unos nueve millones de euros en nóminas de los últimos cinco años, además de mantener congelado el sueldo en ese tiempo. A su vez, ahora que tienen cerrar un nuevo convenio colectivo, temen que la institución insular ponga sobre la mesa una propuesta para mantenerles el mismo sueldo en la próxima década (hasta el final de la concesión de los servicios públicos en 2024) como contraprestación para saldar el dinero que está pendiente por el anterior contrato programa.

La empresa evitó ayer pronunciarse tras la reunión. Y, aunque reconoce la existencia de un acuciante problema de liquidez, señala que están buscando una solución de presente y para el futuro. Por su parte, María del Carmen Rosario alegó que Transportes está cumpliendo ahora con los pagos y que el actual contrato programa, destinado a subvencionar las líneas deficitarias y los precios populares para los usuarios, sigue teniendo vigencia hasta dentro de dos años.

Los trabajadores defienden que las explicaciones dadas por la consejera no son "suficientes", ya que no se han concretado ninguna propuesta que permita la desconvocatoria de la huelga.

La plantilla entiende que la falta de acuerdo perjudica la subsistencia de la empresa y de sus puestos de trabajo. La empresa da empleo a 700 personas.

Al mismo tiempo, los sindicatos ven con preocupación la posibilidad de que en esas negociaciones se ponga sobre la mesa una congelación de la masa salarial hasta el año 2024. Y reclaman en materia laboral que se respete el cuadro de servicios acordado, por entender que repercute en la prestación que Global da a los usuarios.

El comité de huelga ratificó ayer que sigue adelante con la huelga de 24 horas prevista para los días 24 y 31 de octubre, 21 y 28 de noviembre y 19 y 26 de diciembre. Pero no es la primera vez que anuncian este tipo de acciones de protesta, ya que también lo hicieron en verano del año pasado por el retraso en los pagos, y llegaron a un acuerdo antes de iniciarse. El transporte público de viajeros es deficitario en la Isla y el reparto de las ayudas del Estado siempre ha generado conflictos.