El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, ha insistido en que él no es "ningún tránsfuga" y ha recordado que fue elegido por votación directa de los ciudadanos, porque así está previsto en la legislación para las corporaciones insulares.

Bravo de Laguna se ha enfrentado este viernes a su primer pleno desde que decidió abandonar el PP tras comprobar que su partido durante décadas no le permitía repetir como cabeza de lista, en una sesión que ha puesto de manifiesto que el grupo popular apoya el día a día de la gestión del Cabildo, pero no ahorra críticas a su presidente.

"Estamos a ocho semanas y son los electores los que tienen la última palabra en las urnas. Veremos si coinciden con su planteamiento. Todo el mundo es consciente de que no soy ningún tránsfuga, ejerzo el derecho constitucional a la participación política", ha defendido el todavía presidente.

Críticas al presidente

Bravo de Laguna hacía estos comentarios como réplica a la portavoz del PSOE, Carolina Darias, que le ha calificado de tránsfuga y le ha instado a marcharse sin retar a que le presenten una moción de censura, porque, a su juicio, ya está "autocensurado".

Las críticas le han llegado al presidente del Cabildo no solo desde la oposición, sino también desde sus antiguos compañeros del PP, grupo que ha distribuido un comunicado firmado por todos sus miembros (incluido Lucas Bravo de Laguna, su hijo), en el que le piden que renuncie y califican de "chantajista" su actitud.

Bravo de Laguna ha explicado al pleno los motivos que le llevaron hace unos días a retirar al consejero de Turismo, Melchor Camón, del PP, los poderes como vicepresidente del Patronato Insular del área.

El presidente ha leído a los consejeros el informe en el que la Intervención formula reparos contra una reclasificación profesional acordada por Camón y la considera "nula de pleno derecho" por haber prescindido totalmente del procedimiento legal previsto.

Informes

Bravo de Laguna ha subrayado que ese "no es un reparo cualquiera" como otros muchos que él ha levantado a lo largo de la legislatura sin "temblarle el pulso", porque consideraba que había informes que avalaban las decisiones cuestionadas o que se trataba de pagos que, de no efectuarse, propiciarían daño injusto a un tercero.

A su juicio, ese reparo legal tiene detrás unos hechos que él califica de "irregularidad" por escoger un término "suave".

Bravo de Laguna ha subrayado que Camón tomó esa decisión con los poderes que él le había delegado, con lo que traicionó su confianza.

"Y, por cierto, para ya decirlo claro, no es el único (caso) que tengo de esta naturaleza", ha denunciado el presidente.

En la misma línea, ha defendido que, ante la situación que se le presentaba con ese reparo de Intervención, retirar los poderes del Patronato al consejero de Turismo "era lo menos que podía hacer".

Bravo de Laguna ha dicho que "no hubiera querido llegar a este extremo", pero ha anunciado que proporcionará a los grupos los documentos correspondientes para que comprueben si la decisión que ha tomado "es la justa o no es la justa".