Al boulevard del Faro de Maspalomas le sobra motivos para declararse zona comercial de alto standing en el sur de Gran Canaria. A las prestigiosas marcas de ropa y perfumería del enclave se suma ahora un nuevo espacio de la marca Rolex, integrado en la tienda de su distribuidor oficial en Canarias, Saphir Joyeros, en el que los amantes del lujo podrán encontrar más de un centenar de modelos de la firma suiza a precios que oscilan entre los 4.000 y 60.000 euros. Autoridades, empresarios y personalidades de la jet set canaria se dieron cita ayer en la inauguración de la primera joyería del Archipiélago que dedica de manera exclusiva una parte de su establecimiento a la venta de los relojes del fabricante helvético. La apuesta ha supuesto una inversión de 800.000 euros.

El gusto por lo exquisito atrae al lujo. Prueba de ello es que la calidad de los materiales con los que el grupo Saphir ha decorado su nuevo punto de venta en Meloneras invita, principalmente, a que al establecimiento entren clientes con alto poder adquisitivo. Cualquier adorno de la tienda alude a los valores de elegancia y prestigio que promueve la marca Rolex. Nada se ha dejado al azar. Desde el uso del color oro envejecido de la corona que ilustra el panel de la firma hasta el verde esmeralda de la pared principal del establecimiento, que a modo de ondas marinas, evocan la impermeabilidad que Rolex consiguió cuando inventó en 1926 el primer reloj resistente al agua.

Renovación

Para conseguir este ambiente selecto y ganar nuevo espacio, el grupo Saphir tuvo que emprender un proyecto de renovación de sus instalaciones que duró dos meses de obras. Alfonso Viera, director de Marketing e hijo del fundador de la cadena de joyerías canaria, asegura que la iniciativa supone "un esfuerzo por ofrecer al visitante un servicio de máxima calidad en una de las zonas turísticas más lujosas de Canarias". En cierta manera, "es una forma de contribuir al futuro del turismo y mejorar el sector con productos novedosos", añade.

En este nuevo espacio, que ocupa una superficie aproximada de 50 metros cuadrados, los clientes podrán encontrar no solo las últimas novedades de la marca, como el modelo GMT-Master, sino también los modelos más emblemáticos y tradicionales. Más de un centenar de piezas únicas a precios que pueden llegar hasta los 60.000 euros.

"Me encanta la decoración de la tienda. Se ha conseguido un espacio luminoso, que juega un papel clave a la hora de apreciar las joyas a través del cristal, moderno y diáfano. Se nota que se ha hecho con muy buen gusto", asegura entusiasmada Pilar Déniz, una de las invitadas de la noche y clienta fiel de la marca.

Además de la venta, tanto en escaparate como a través de pedidos, el grupo Saphir ofrece en sus instalaciones servicio de reparación de la firma suiza. Actualmente la empresa de la familia Viera cuenta con ocho establecimientos dedicados en exclusivo al mundo del lujo en el sector de la joyería y la relojería: tres tiendas en Las Palmas de Gran Canaria, otras tres en el Sur y una en Tenerife. Más del 60% de sus clientes compran de forma asidua en estos puntos de venta. Anoche el establecimiento cosecho los elogios de los asistentes a este nuevo espacio de lujo.