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El nacimiento perpetuo de Ingenio

El Museo de Piedras acoge el belén de mayor superficie de Canarias con 1.500 metros cuadrados

Vista de parte del belén del Museo de Piedras de Ingenio. YAIZA SOCORRO

"El belén lo tenemos abierto todo el año porque su montaje requiere mucho tiempo por lo grande que es, aunque en estas fechas cuenta con más visitantes". Así lo expresa Segunda Gil Espino, que junto con sus hermanas Victoria y María, regenta el Museo de Piedras y Artesanía Canaria de Ingenio. "Desde que mi hermano Carmelo abrió el museo en 1964, hace ya más de 50 años, tenemos belén. Primero en el escaparate, después en el patio hasta que hicimos la gran instalación que seguimos ampliando".

La familia Gil Espino lamenta que, por falta de tiempo y por la laboriosidad que requiere, no haya podido abrir la nueva cueva y su pesebre de más de 60 metros cuadrados. El tradicional belén del Museo de Piedras dispone de más de 1.500 metros cuadrados de cuidada decoración alegórica a la villa de Ingenio y a la arquitectura canaria. El nacimiento cuenta con más de 1.200 piezas, miniaturas que recrean personajes, objetos cotidianos y edificaciones, una colección que sus dueños esperan incrementar el próximo año con figuras del molino e iglesia de Las Rosas, propiedad también de la familia.

Francisco Espino y Paco Pineda son los encargados de montar y mantener el belén, desde que falleciese su creador y fundador del Museo de Piedras de Ingenio, Carmelo Gil. En las anteriores ediciones tardaban hasta tres meses en recopilar, adecentar y restaurar todos y cada uno de los elementos que conforman el espectacular nacimiento. Cuenta con dos grandes partes: El Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento con todo detalle.

Destacan los elementos propios de la cultura canaria para su ambientación, como edificaciones típicas con sus balcones, tienda de aceite y vinagre, escenas de ganadería y agricultura, la iglesia de La Candelaria, todo ello perfectamente integrado y complementado con sus luces, agua y demás elementos decorativos propios de la Navidad. También cuenta, desde el año 2002, con una réplica de la cueva de Jerusalén hecha a base de una piedra de los lugares santos. "Lo más destacado y admirado por todos son los elementos canarios del nacimiento", asegura una de las fundadoras.

Segunda Gil apunta que durante el año es visitado por "más turistas que canarios, siendo la entrada un euro. La crisis también nos ha afectado". El museo alberga una extensa colección de minerales, piedras de origen volcánico, la mayoría de África, una muestra variada de los trabajos artesanos de Ingenio, especialmente los calados y El Granero, centro de exposiciones permanentes. Además, se puede contemplar de la ermita del Cristo hecho por los indios tarascos de México con una exposición sacra.

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