El hijo de Juan Santana Santana, Juansito, conocido por Nani, murió justo un año antes que su padre. Era uno de los organizadores de la Fiesta del Barro de La Atalaya. Falleció de repente y por ello se aplazó la fiesta. Justo un año después ha muerto Juansito. Curiosamente el día anterior falleció Carmen Santana, la mujer de Santiago Cabrera y madre de Javier Cabrera, otro de los fundadores de la Fiesta del Barro.

Juansito era una persona muy querida en el barrio y en toda la isla, donde era conocido porque su clientela procedía de distintos pueblos de Gran Canaria y de la capital. "Pasó por la vida sin molestar a nadie, siempre tenía una sonrisa, era muy paciente, tenía la típica pachorra antigua. Era de un buen trato familiar y campechano. Era muy buena gente y caía bien a todo el mundo", recuerda Francisco Montesdeoca, fundador junto a su hijo Nani de la famosa Fiesta del Barro de La Atalaya y presidente del club de fútbol Estrella Roja, donde también jugaba Rolando.

El periodista Pepe Martín Ramos, hijo predilecto de Santa Brígida e ilustre talayero, recuerda el bar Juansito desde los años setenta. "Antes llevaba el bar del Ramal, que está debajo de la antigua sociedad de La Atalaya, ahora cerrado. Al prinicipio se dedicaba a la construcción pero luego se pasó a la hostelería como aficionado primero y luego como profesional. Empezó con una tasquita pequeña y luego fue ampliando, compró unas cuevas y se las curró junto a su familia", manifiesta.

Sus hijos son los que han mantenido la bandera del negocio familiar. "En La Atalaya casco solo existían los bares de abajo. Ahora, que hay más gente, hay menos bares. Recientemente cerró el bar Federico, uno de los históricos, que estaba al lado de El Vinco de Carmelo. También cerró El Ramal". Además de El Vinco del incombustible Carmelo, solo queda Juancito, el histórico de toda la vida donde se daba cita la juventud talayera y foránea para degustar el vino del Monte y las tapas caseras.

Los hijos de Juansito le ayudaban en el bar desde pequeñitos. En El Ramal muchas veces sus hijos se quedaban todos dentro y de alguna manera hacían vida allí, dormían en el bar en sus orígenes para arrancar el negocio de la familia. "En el bar había habitaciones con baño cocina y allí se quedaban. Siempre ha sido una familia luchadora y trabajadora que se ha ganado el pan de cada día con el sudor de su frente", señala Montesdeoca.

Juansito falleció el 4 de julio, el mismo día que a su hijo Nani un año antes sufrió el derrame cerebral que lo llevó a la muerte dos semanas después en el hospital Negrín. En el cementerio su lápida está en el tercer lineal y en el cuarto se encuentra la de Juansito, el patriarca que ejercía de jefe, padre y amigo. Los hermanos eran también amigos y compañeros. Siempre ha sido una familia muy unida. Alexis es el único varón que queda de los hermanos.

El bar Juansito seguía manteniendo todas sus cuevas por dentro, muy visitadas por los turistas. Toda su vida Juansito se dedicó a su bar, aunque tras el fallecimiento de su hijo Nani el hombre empezó a retroceder, hasta que se le complicó con otros asuntos de salud. Tras la últimas operación, falleció esta semana, dejando viuda a María del Pino Gutiérrez Santana y huérfanos a sus hijos Rosa María, Mercedes y Alexis. Su hija mayor, Obdulia, y el benjamín, Rolando, fallecieron antes que él.

Ahora el bar lo lleva su hijo Alexis, que es miembro de la mesa que organiza la Fiesta del Barro de La Atalaya.