La concejalía de Playas del Ayuntamiento de Santa María de Guía, que dirige Leticia García Díaz, hizo ayer un balance positivo de los meses de verano en cuanto a seguridad en el litoral guiense y de los servicios de salvamento y socorrismo, que finalizó de forma oficial el pasado 15 de septiembre, coincidiendo con el inicio del curso escolar y la menor afluencia de personas.

La playa de San Felipe y las piscinas naturales de Roque Prieto han contado con un servicio de salvamento prestado por la empresa Samur Canarias S.L, que contaron con dos torres de vigilancia, una moto acuática de rescate, una ambulancia de soporte vital básico y un equipo de buceo, además de cuatro socorristas, dos en cada una de estas zonas de costa.

Según destacó la edil de Playas, en esta campaña se incidió en la prevención de la exposición al peligro, garantizando la seguridad de los bañistas y restringiendo, en ocasiones, el baño para evitar sucesos de gravedad, además de inculcar a los usuarios los hábitos de prevención para evitar riesgos.