La Cumbre vivió ayer un día de contrastes. Al mismo tiempo que el Roque Nublo recibía un manto de escarcha y ráfagas de aparatos eléctricos, en otros rincones de Tejeda se quedaban en esos momentos sin una gota de agua. Es lo que el alcalde, Francisco Perera, calificaba como "un fenómeno extraño".

El frío regresó al centro de Gran Canaria. Pasadas las tres de la tarde los termómetros marcaban en torno a los ocho grados. El resultado fue una fuerte lluvia acompañada de hielo, al que se sumaron los truenos y relámpagos.

Las nuevas condiciones apenas duraron unas dos horas, entre la una y media y las tres y media de la tarde, el tiempo suficiente para cambiar el paisaje del interior de Gran Canaria y causar algún que otro susto.

El cambio meteorológico animó a muchos curiosos a subir hasta el interior de la Isla casi de forma improvisada, aunque no contaran con la ropa adecuada para caminar entre el hielo, ni tampoco para moverse con el coche sobre un asfalto muy resbaladizo, con la posibilidad de la aparición de placas. Esta situación ocasionó algún susto a conductores y ocupantes de distintos vehículos, hasta que las carreteras más peligrosas fueron cerradas al tráfico por el personal de Carreteras del Cabildo, para evitar un colapso.

La granizada es la primera del año que se registra en Tejeda en lo que va de año. Y también es muy probable que sea la última del invierno, debido al inminente cambio de estación.

Aunque la Cumbre se cubrió de aguanieve, también hay quien asegura haber visto algunos coches con algunos centímetros de nieve. Y una de las imágenes más llamativa es el Roque Nublo decorado con una alfombra blanca , que contrasta con la aridez del terreno.

Las condiciones llevaron también a personas que estaban acampadas en Llanos de La Pez a recoger todo su equipamiento y regresar a sus casas. De cualquier forma, según el Cabildo, las áreas recreativas y zonas da acampadas permanecen abiertas, ya que la situación meteorológica ha comenzado a remitir y no es necesario su cierre.

Caída fatal en el Roque Nublo

El piso cubierto de hielo causó una jugarreta a una mujer de 49 años, que sobre la una del mediodía caminaba junto a un grupo de compañeros residentes en Gran Canaria por el sendero del Roque Nublo. La falta de una vestimenta adecuada para este tipo de paseos con las condiciones que presentaba el camino tras la granizada propició que resbalara y se rompiera un tobillo.

Ante las dificultades para trasladarla, se activó a los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria del puesto de San Mateo, que emplearon una camilla de rescate tipo kong, que permite apoyarse en los hombros y dispone de ruedas, para llevarla hasta el aparcamiento, tras recorrer casi un kilómetro a pie. Desde allí una ambulancia se encargó de su evacuación hasta un centro asistencial, donde fue atendida.

A pesar del nuevo panorama que ofrecía ayer la Cumbre grancanaria, la jornada transcurrió con relativa tranquilidad, sin que se registraran incidentes de gran relevancia.

Las condiciones mejoraron a lo largo de la tarde. Pero la atmósfera sigue siendo muy inestable en estos momentos, por lo que los expertos no descartan que se pueden generar nuevos fenómenos puntuales en las próximas horas. De cualquier forma, existen pocas posibilidades de que se repita las condiciones tan peculiares que tuvieron lugar ayer.