Los futuros profesionales del municipio de San Bartolomé de Tirajana se presentan aventureros, entusiastas y con "muchas ganas de aprender". Un total de 28 alumnos de Formación Profesional del IES Faro de Maspalomas culminarán su estudios con dos meses de prácticas en empresas repartidas por cinco países de Europa.

El próximo mes de abril la ciudad de Bolonia (norte de Italia) se convertirá en el nuevo hogar y centro de trabajo de Katrina Rodríguez (20), Raquel Basalo (18), Tania Guedes (18) y Rosario Rodríguez (19). Estas cuatro alumnas de los ciclos de Estética y Peluquería del centro educativo de San Fernando compartirán durante dos meses "piso", ilusiones y buenas prácticas en un sector en el que Italia se sitúa a la vanguardia. Quieren aprender las nuevas técnicas del oficio, entre las que destacan los "bronceados", visitar "El Vaticano", hacer nuevos amigos y, sobre todo, adquirir nuevas "competencias profesionales". Ninguna de ellas, al menos por motivos laborales, ha disfruta de una estancia similar en el extranjero. "Al principio" la experiencia da un poco de "miedo", asegura Tania junto a sus compañeras de clase, pero seguro que "al tercer día" ya estaremos "integradas" en el trabajo y "en el día a día", agrega con una sonrisa.

Durante su estancia en Italia estas jóvenes realizarán prácticas en diferentes empresas del sector: spa, peluquerías y centro de belleza, principalmente. En el marco de un programa europeo de movilidad, el IES Faro Maspalomas ha gestionado directamente con los centros de trabajo el período formativo de los beneficiarios. Cada alumno recibirá "una ayuda europea" de aproximadamente de 2.500 euros para financiar los "gastos de transporte y alojamiento", explica la responsable del proyecto en el centro, Sonia Ferrera, y un valor añadido a su currículo.

Muchos tienen solo billete de ida a su nuevo destino. Otros no dudan en quedarse en el extranjero, "si se diera la oportunidad". Jonay Blanch (24), estudiante de Cocina, viaja a la ciudad alemana de Vogtland con la ilusión de abrir una nueva puerta en su futuro profesional. Se va a aprender el recetario alemán e internacional en los fogones de un hotel rural, que tiene hasta una pista de esquí en sus terrenos aledaños. "¡Quién sabe! Igual hasta me animo a aprender a esquiar", asegura el joven, que estudia desde hace dos años alemán y ya acumula experiencia en la recepción de un hotel de Maspalomas. Lo que sí tiene claro Jonay es que no va a regresar a casa sin antes haber aprendido a elaborar los "aliños" de las ensaladas germanas y las famosas "albóndigas verdes".

El que ha visto desde chiquitito hacer este tipo de recetas en casa y por eso "prefiere aprender cosas nuevas" es su compañero Alexander Hubert (20), con padre alemán y madre de Temisas. Este joven de Maspalomas ha elegido Irlanda como destino para su salto a Europa. Ya tiene experiencia como guía turístico por la Isla y ahora quiere especializarse en una actividad, que como él mismo asegura, es "clave" en el sector turístico: la gastronomía. De su paso por tierras celtas espera regresar con la receta de la tarta hecha con cerveza Guiness y otras exquisiteces carnívoras.

El IES Faro Maspalomas, tal y como recordó su directora, Paqui Sosa, es la tercera vez que participa en este programa europeo. En esta ocasión, Francia y República Checa se suman al mapa de oportunidades laborales de los estudiantes. Gracias al apoyo de empresas locales, como Lopesan y Barceló, los chicos pueden realizar la última fase de su período formativo en hoteles que se localizan en Praga y otras ciudades alemanas. Más del 60% de los estudiantes culmina la beca con un contrato de trabajo.