Dolores Rodríguez Socorro celebró este miércoles 5 de abril su 102 cumpleaños rodeada de hijos, nietos y bisnietos en su casa de Teror, donde vive desde hace más de 40 años. Con una memoria prodigiosa y una salud envidiable, Lolita, como la conocen cariñosamente, es la tercera más longeva de las 6 mujeres que actualmente sobrepasan el siglo de vida en el municipio. El alcalde de Teror, Gonzalo Rosario, junto a la concejala del Mayor, Sabina Estévez, y representantes municipales, felicitaron esta mañana a la centenaria vecina de Teror haciéndole entrega de un ramo de flores y una placa del Ayuntamiento.

Madre de cuatro hijos, abuela de nueve nietos y bisabuela en varias ocasiones, Lolita ha heredado de su abuelo el gen de la longevidad, que vivió hasta los 105 años. De sus 11 hermanos/as, sólo una de sus hermanas vive con 95 años y se siente afortunada al superar el siglo con tanta salud. “Lo único que me falla un poco son las piernas y el oído”, reconoce.

A pesar de la edad, no ha perdido su afición a las “sopas de letras”, a leer el periódico, o hacer ganchillo y punto de cruz. Sólo toma una pastilla para la tensión y nunca ha pasado por quirófano.

Como muchas personas mayores, Lolita recuerda de los tiempos difíciles que le tocó vivir, de su trabajo, junto a su esposo Benito Suárez Guerra en una finca, o anteriormente como panadera. De la receta para vivir tantos, nos explica que “el secreto de la longevidad no lo sabe nadie”. Pero por si puede servir para algo, Lolita nos comenta que le encanta comer gofio. A su edad, pocas personas se mantienen en tan buenas condiciones físicas y mentales. Así es que, ante la invitación del Ayuntamiento de Teror de participar en algún acto del Mes del Mayor, el próximo mes de mayo, Lolita se mostró encantada de participar.