Las 46 trabajadoras del servicio de limpieza de diez colegios de educación Infantil y Primaria de Arrecife, que estaban realizando una huelga indefinida desde el pasado nueve de diciembre, volvieron ayer a sus puestos de trabajo después de que la empresa Clusa les haya abonado la pasada jornada sus salarios de noviembre y diciembre.

Sin embargo, la posibilidad de retomar las movilizaciones sigue aún en pie, toda vez que las empleadas han optado por aplazar el paro y no suspenderlo. De ese modo, han dado una tregua a Clusa hasta el próximo ocho de febrero con el fin de solucionar "algunos flecos que quedan pendientes del convenio colectivo, entre ellos el tema de la bolsa de vacaciones, y comprobar si la empresa abona puntualmente los sueldos de enero", aseguró el secretario insular de UGT, César Reyes.

Si el cinco de febrero las limpiadoras no han cobrado la nómina de este mes, probablemente, materializarán de nuevo las protestas, dijo Reyes.

A las dos de la tarde de ayer, tras finalizar las clases, la normalidad regresaba a las labores de aseo de los colegios para poner a punto las instalaciones, entre ellas las seis aulas de los tres niveles de Infantil en el colegio de Argana Alta que fueron pintadas durante las vacaciones navideñas de los escolares y docentes y que no estaban en condiciones de acoger a primera hora a los alumnos.

Esa situación de remozamiento en el aulario de Infantil, que coincidió con los servicios mínimos de limpieza durante diciembre y comienzos de enero, impidió que unos 120 escolares tuvieran acondicionadas sus dependencias desde primeras horas de la mañana, explicó el director del colegio de Argana Alta, Javier Felipe. Ante ese inconveniente, los padres de una treintena de chicos decidieron ir a buscar a sus hijos al centro.

Mientras tanto, los profesores trataron de organizar el mobiliario y tras, aproximadamente, un par de horas, los pupilos que seguían en el colegio pudieron regresar a sus clases, apuntó el responsable educativo.

Gutiérrez, valoró "la colaboración exquisita de los equipos directivos y del profesorado de los diferentes colegios, que ha permitido que no se haya perdido ni un solo día de clase por este motivo". Por su parte, Lemaur afirmó que el consistorio "mantiene vivo el expediente de rescisión de contrato con la empresa Clusa, concesionaria del servicio, a la espera de los informes técnicos municipales" y precisó que "paralelamente, se iniciará el proceso con el fin de sacar a concurso público un nuevo contrato, ya que el actual concluye el próximo mes de mayo".

La calma ha llegado, de momento, a los alrededor de 5.300 pupilos y 420 profesores que se vieron afectados por la movilización en Arrecife.

En el colegio de Costa Teguise también se ha conseguido paralizar, por ahora, la protesta indefinida anunciada por las tres trabajadoras de la entidad Rinca SA y cuya fecha de inicio era, precisamente, ayer.