El investigador de los proyectos espaciales de la Nasa y de la Agencia Espacial Europea, Jesús Martínez-Frías se ha desplazado a Lanzarote para ver la posibilidad de realizar determinados ensayos con propototipos de la futura misión ExoMars al planeta Marte. "Canarias en general y Lanzarote en particular es una zona que reúne condiciones privilegiadas para ser considerada como "análogo de Marte". Aunque ningún sitio de la Tierra es exactamente como Marte, en determinadas áreas de nuestro planeta es posible desarrollar ciencia muy útil para las misiones, ensayar prototipos, desarrollar modelos y obtener información que nos ayuda a comprender los procesos desarrollados en dicho planeta. Esto es lo que pretendemos realizar en Lanzarote desde distintas perspectivas", señala Martínez Frías que el pasado mes de abril estuvo realizando diversos estudios en el parque nacional de Timanfaya.

"Timanfaya es un lugar único, y precisamente la zona donde pensamos que podemos lanzar esta investigación, por sus peculiaridades como sistema volcánico complejo y similitudes geomorfológicas, mineralógicas y geoquímicas con Marte y también por la posibilidad de abordar los estudios y ensayos en distintos contextos, relacionados con el agua e incluso también en tubos de lava", destaca Martínez-Frías que también es el investigador principal del Grupo de Investigación de "Meteoritos y Geociencias Planetarias del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)

Martínez-Frías considera que, además de la propia relevancia científica de Timanfaya, podría ser factible realizar determinados ensayos espectroscópicos con prototipos de la futura misión ExoMars. La espectroscopia es una técnica que permite hacer análisis no destructivos y que está prevista para la misión ExoMars para analizar minerales, rocas y también compuestos orgánicos.

Otra de las zonas que podrían servir como campo de pruebas para la exploración de Marte se encuentra en las entrañas de Lanzarote, concretamente, en el interior de la Cueva de los Verdes donde se encuentra el Laboratorio de Geodinámica de Lanzarote perteneciente al Instituto de Geociencias (IGEO) del CSIC y la Universidad Complutense de Madrid.

"Estamos iniciando este proyecto y aún tenemos que centrar rigurosamente una selección de zonas, ambientes y procesos (incluyendo también aspectos biogeológicos relacionados con la habitabilidad). Por ello, creo que debemos ir paso a paso y no adelantarnos a nuestras propias expectativas. Sin embargo, el IGEO cuenta con un laboratorio en Lanzarote que nos puede ayudar a disponer de una información muy importante para algunos de estos estudios", afirma.