El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, visitó en la tarde de ayer tres de las localidades más afectadas por la tromba de agua del pasado sábado que cayó sobre el municipio de Haría, la comarca de Lanzarote en la que el paso de la borrasca provocó los mayores destrozos. La primera parada fue en Tabayesco, donde la calle Chafariz se convirtió en un río de barro que inundó viviendas y fincas y que obligó a evacuar a varias familias. A continuación, Clavijo se dirigió hacia el balneario y la playa de La Garita, dos zonas en las que el lodo también hizo de las suyas y finalmente concluyó su recorrido en el puerto de Órzola, cuyo muelle es el punto de conexión por mar con la isla de La Graciosa.
Aunque ese servicio marítimo no se ha visto afectado, el alcalde de Haría, Marciano Acuña, afirmó que la marea de barro procedente del barranco de Órzola, cuyo cauce desemboca en la dársena interior del puerto, "ha generado una gran catástrofe medioambiental".
En algunos puntos de esa bahía el lodo alcanza el metro de altura. Esa situación, lamentó Acuña, "conlleva una destrucción de la vida del fondo marino, por lo que tenemos que buscar una solución, ya que no podemos permitir que esto siga así dándose año tras año". A la mezcla del agua de lluvia y tierra se añade la seba que desde hace días se acumula en el puerto y que "no sale de la bahía porque la hemos cerrado, lo que crea un problema medioambiental de primer nivel que hay que corregir".
El pasado mes de julio, el Consejo Insular de Aguas y Puertos Canarios firmaron un convenio para cofinanciar las obras de encauzamiento del barranco de Órzola. La intervención, con un presupuesto de 526.336,72 euros, de los que el Consejo Insular de Aguas aportará el 60% (315.802,03 euros) y Puerto Canarios el 40% restante (210.534,69 euros), consistirá en desviar el cauce del barranco desde su actual desembocadura en dirección a la costa sur, fuera de la bocana del muelle.
Sin embargo, Acuña admitió que "existe una traba administrativa que impide impulsar la ejecución de esos trabajos". El presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, aclaró al respecto que "será necesario modificar el Plan Insular de Ordenación y el Plan General de Haría para poder hacer la obra".
Notificación de las pérdidas
En relación a las ayudas desde su Ejecutivo, Clavijo se comprometió a facilitar apoyo con una línea de subvención de carácter social a las familias que han visto seriamente dañados sus inmuebles y han perdido sus enseres. El presidente desconoce a cuánto ascienden las pérdidas causadas por la tormenta en Lanzarote.
"Antes del próximo viernes, que se celebrará el Consejo de Ministros", aseveró Clavijo, "tanto los alcaldes se comprometieron con el presidente del Cabildo, como yo con el presidente de España cuando me llamó, a trasladarle los informes de la evaluación para ver qué declaración hace el Consejo de Ministros y qué ayudas se arbitrarán". Añadió que "hay algunas infraestructuras con las que tenemos que colaborar con el Cabildo para que los daños sean menores en un futuro".
Por otro lado, Acuña aseveró que "estamos trabajando con el Cabildo en la elaboración del proyecto para la rehabilitación del barranco de Tabayesco, que fue el que se vio más afectado en el municipio". Añadió que hasta el momento "unas veinte o treinta personas nos han notificado daños en sus fincas".
Sobre la petición, ayer, de los eurodiputados socialistas Juan Fernando López Aguilar y José Blanco a la Comisión para que Canarias pueda acceder al Fondo de Solidaridad de la Unión Europea para compensar los daños ocasionados por las lluvias, Clavijo puntualizó que "por lo que hemos visto del Plan Juncker es difícil que encontremos para una catástrofe una línea de ayudas en Europa, pero no obstante, lo miraremos".
