La exconsejera delegada, Plácida Guerra, y el exgerente de Inalsa, Rafael Elorrieta, se negaron a declarar ayer ante el juzgado de Instrucción número 4 de Arrecife que investiga las presuntas irregularidades económicas en esta empresa pública que se encargaba antes de su privatización de la producción y distribución de agua en Lanzarote. Los dos imputados alegaron que se les había notificado con escaso tiempo para preparar sus defensas en este nuevo caso.