El obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases, presidió ayer en la ermita de Femés (Yaiza) por primera vez la misa en honor al patrón de Lanzarote y patrón histórico de la citada Diócesis, San Marcial. "Tengo mucha ilusión por esta celebración", dijo Cases. Invitó a los feligreses a llevar la fe a los lugares a los que acudan, "como hicieron los marinos normandos que trajeron la fe y a San Marcial tras conquistar Lanzarote en 1402, aunque navegaron bajo la Corona de Castilla". Apuntó que "San Marcial simboliza que aquí llegó la fe cristina", recordando que la historia de la conquista normanda en Los Ajaches tiene tintes de sangre y miseria "pero también trajo la fe", porque San Marcial, agregó, "es una historia de fe".

Al hilo de la importancia de San Marcial en la historia de la cristiandad en las Islas, el Obispo sostuvo que la gran misión de los católicos ahora es "transmitir a las nuevas generaciones la fe de nuestros padres y abuelos".

Por otro lado, cree que hay que darle a San Marcial la importancia que se merece porque "tenemos la fecha del 7 de julio de 1404 como la del principio de la Diócesis del Rubicón y Canarias" a raíz de la bula del Papa Benedicto XIII que erigió ese año el Obispado del Rubicón.

Decenas de fieles y visitantes siguieron la función de honra al patrón de Canarias y la peregrinación alrededor de la Plaza del Rubicón. Los coros de la Agrupación Vocal de Yaiza, en la misa, y la música de la Banda Municipal de Yaiza, en la procesión, acompañaron los actos religiosos. La alcaldesa de Yaiza, Gladys Acuña, el vicepresidente del Cabildo, José Juan Cruz, los alcaldes de Teguise, Oswaldo Betancort, y de Tías, José Francisco Hernández, así como representantes públicos de Yaiza y de distintas corporaciones, estuvieron al lado de los creyentes en el fresco atardecer de Femés.

Lala, una vecina de Femés, pregonaba que "nuestra historia comenzó un 7 de julio de 1.404 cuando se fundó por estas tierras la Diócesis del Rubicón bajo el patronazgo de San Marcial. Durante este tiempo su figura nos ha dado fuerzas para los momentos de flaqueza y dificultad". Femés, asimismo, quiso dejar constancia de su agradecimiento a "misioneros, sacerdotes, religiosos, monjas y seglares que a lo largo de estos siglos han ido cultivando la fe de nuestro pueblo en Lanzarote y toda Canarias".

Femés y vecinos de otras localidades de la Isla vivieron intensamente el Día de San Marcial que finalizó con una emocionante ofrenda de toque y baile de la Agrupación Folklórica Rubicón a los pies del Santo, en la fachada de la Ermita, y un grito unánime de "Viva San Marcial". El concejal de Festejos de Yaiza, Javier Camacho, agradece a la Parroquia de Yaiza y al Obispado de Canarias su vinculación y compromiso con las Fiestas de San Marcial. Cases admitió que estaba en deuda con el pueblo de Femés, un pueblo repleto de historia que sigue reivindicando su importancia histórica y religiosa en el contexto archipielágico.