| Sin motivo. El jurado establece que el subinspector y el oficial acudieron a la calle Fernando Guanarteme esquina con Pelayo sin ningún motivo. Ahí, en ese punto, cuatro agentes de la Policía Local pararon a dos motoristas que dieron positivo en el control de alcoholemia. Eran las 02.35 horas del 25 de febrero de 2009, y el mando policial trató de dejar sin efecto la actuación de los agentes. Primero mediante una llamada de teléfono, después presentado en el lugar de los hechos.

| Por humanidad. Antes de personarse en el control policial, el subinspector recogió a la novia y una amiga de uno de los motoristas multados y las subió al coche oficial. El jurado considera que "no existía motivo alguno que justificara tal traslado". El mando policial dijo en el juicio que lo hizo por "humanidad", porque las mujeres no tenían llaves.