Vecinos y usuarios de las Alcaravaneras mostraron su enorme malestar por el vertido de combustible que ha afectado a la zona de baño y demandaron a las administraciones medidas que protejan la playa capitalina ante cualquier derrame de hidrocarburos.

El Ayuntamiento capitalino mantuvo ayer por segundo día consecutivo el aviso de "zona temporalmente no recomendada para el baño". La medida durará hasta que se evapore totalmente del agua la ligera capa de grasa y desaparezca el alquitrán que aún persiste, tras quedar limpia de residuos de alquitrán.

"Se van a cargar la playa". Esta es la frase que más definía la contrariedad de los usuarios por los efectos de la mancha de 200 metros de largo de fuel pesado 380 (combustible que se suministra a los barcos) que el martes entró en la dársena interior del puerto de La Luz.

Armando Perdomo indicó que hacía mucho tiempo que Las Alcaravaneras no sufría una contaminación de combustible como la registrada en esta ocasión y que afectó a la mitad norte de la zona de baño.

Perdomo, que estaba en la playa el martes, criticó la tardanza de la intervención de Puertos de Las Palmas desde que se dio el aviso cuando la mancha estaba a cinco metros de las orilla. "Yo avisé a las 12.30 y hasta las dos de la tarde no llegaron".

Este usuario propuso para evitar que vuelva a darse un siniestro como este la colocación de una barrera anticontaminante de manera permanente a la altura de las boyas que delimitan la zona de baño del área de fondeo de las embarcaciones deportivas.

Protección

Ángeles Castillo y Aixa Morales expusieron su preocupación por el efecto del combustible y el grave riesgo que ha corrido las Alcaravaneras con este vertido de fuel marino ya que el tiempo sur fue leve y limitó sus efectos a 50 metros de playa.

"Esta playa es fantástica porque es bastante familiar y acogedora", indicó Ángeles apenada por la contaminación que ha registrado su zona de baño preferida. Aixa solicitó más vigilancia policial y de la Autoridad Portuaria para protegerla de incidentes de este tipo.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, señaló ayer que "casi con total seguridad" la causa de esta contaminación de Las Alcaravaneras y el Muelle Deportivo se debe a un derrame de combustible.

Ibarra indicó que le han pasado a Capitanía Marítima de Las Palmas un listado con los ocho barcos que tomaron combustible el martes pasado. El organismo del Ministerio de Fomento analizará el suministro de estos buques para comprobar que barco o gabarra ocasionó el vertido de fuel pesado 380.

Por su parte, el consistorio capitalino dio ayer por finalizado el trabajo de limpieza del vertido existente en la zona del espigón del Real Club Náutico de Gran Canaria y la playa de las Alcaravaneras quedando totalmente limpia residuos de alquitrán.

En la jornada de ayer fue retirada la barrera contaminante, aunque se mantuvieron las vallas no recomendando el baño de forma temporal. El Ayuntamiento informó, además, que los operarios del Servicio de Limpieza de Playas continuarán con un seguimiento en Alcaravaneras hasta su total recuperación. Por su parte, la Concejalía de Salud Pública realiza análisis diarios del agua en la zona de baño capitalina para conocer su situación tras el vertido de combustible.