La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

De Altavista al Universo

Carla García, de 25 años, entre las favoritas para la final del certamen de Miss Universo en Las Vegas

De Altavista al Universo

Algunos vecinos del barrio de Altavista, en Las Palmas de Gran Canaria, estarán mucho más pendientes este próximo domingo a unas votaciones en Las Vegas (EEUU), cuyo objetivo se aleja bastante de las que dirimirás en las urnas electorales el futuro de España. La joven Carla García se la puede jugar esa noche en la final del certamen de Miss Universo 2015, que se desarrolla desde el 1 diciembre en la ciudad estadounidense y donde esta médico de 25 años se ha afianzado entre las favoritas para pasar a la reñida final, todo un logro cuando se habla de una cita en la cual se reúne a las 80 y tantas mujeres más guapas del mundo. Casi nada.

Licenciada en Medicina y residente en cirugía, Carla García Barber tiene 25 años, mide 1,75, está soltera y con su participación en los certámenes de belleza pretende también demostrar que "las misses no son tontas; las chicas guapas sí tienen cerebro. A los 19 años me apunté por primera vez a un certamen de belleza y nunca me he sentido como un objeto".

Desde Las Vegas y tras hacerse públicas ayer las primeras fotos oficiales que de la candidata de España ofrece la organización del certamen de Miss Universo, esta joven que habla alemán, inglés y español admite que se encuentra "muy a gusto y cómoda" de cara a la crucial semana que le espera y que puede concluir con el título de la mujer más bella del universo en manos de la grancanaria.

Esta guapa oficial explicaba ayer domingo desde el Hotel Planet Hollywood, residencia oficial de las candidatas, que sus expectativas se han visto "superadas" con todo lo que rodea al concurso y la organización de este evento, que siguen por televisión millones de personas de todo el mundo. "Una se puede imaginar más o menos cómo puede ser por toda la difusión y repercusión que tiene, pero hasta que no estás aquí no te das cuenta realmente de la inolvidable que será esta experiencia y qué puede significar este certamen en la vida de una persona", explica esta vecina de Altavista que mantiene con sus rivales una relación fabulosa.

"La imagen que a veces quieren ofrecer de estos concursos de belleza está algo exagerada", dice. "Si bien es cierto que no deja de ser una competición, también lo es que la competencia es deportiva y limpia. En ese sentido me siento feliz y tranquila porque el ambiente es muy bueno y estoy muy cómoda representando a España como se merece".

También valora Carla "el trato imparcial e impecable" de la organización. "Me ha encantado ese aspecto del certamen", añade sin eludir cuestiones sobre las posibles contrincantes. "Claro que hay chicas bellísimas pero todo puede pasar. No suelo hacer mucho caso de las apuestas, porque desde dentro se puede tener una percepción del concurso y desde fuera otra totalmente distinta. No dejo que me influyan en absoluto para estar tranquila. Yo misma, otros años, he tenido favoritas que luego no han ganado o chicas que no las tenían en cuenta y llegan muy lejos... Ahora que estoy viviéndolo desde dentro", añade la Miss España 2015, "puedo entender por qué chicas con una belleza impresionante no han ganado: no todo es una cara bonita. Se busca un conjunto de cualidades y factores los que se tienen en cuenta y mucha gente desde fuera no se fija o nos fijábamos en eso o no se termina de entender", continúa explicando esta profesional que deja aparcada un año su profesión, que ha desempeñado en un centro hospitalario de Alemania, para sumergirse de lleno en esta experiencia.

"Para hacer guardias médicas", asegura, "espero que me quede toda la vida. Hay momento para todo. Mi profesión de médico es totalmente vocacional y las guardias son muy sacrificadas, pero también son necesarias por el bien del paciente de cara a su atención. La salud no entiende de horarios ni de turnos. Actualmente", prosigue, "estoy disfrutando de otra de mis pasiones que es ser embajadora de mi país. Para ejercer mi profesión tendré toda la vida si Dios quiere para hacerlas y con mucho gusto", asegura Carla García.

"Hay perfiles de todo tipo", responde cuando la conversación vuelve a centrarse en las compañeras que también aspiran a Miss Universo. "Independientemente del resultado final, con lo que realmente te quedas es con las amistades que haces durante el concurso y las maravillosas personas con las que te cruzas en este camino. Puede sonar a tópico, pero en general somos mujeres con la misma ilusión luchando por un sueño", admite la grancanaria. "Lo mejor que me podía pasar era encontrarme con un grupo bueno en el que no haya malas energías que no sirvan para absolutamente nada", concluye mientras se prepara para disfrutar de otra maratoniana jornada entre las más bellas del Universo.

Compartir el artículo

stats