"Le deseamos suerte en el caso de que Puertos del Estado termine el expediente favorable a sus intereses" porque "a nadie le interesa que al puerto de Lanzarote le vaya mal". Luis Ibarra, presidente de la Autoridad Portuaria, se refirió de esta manera a la pregunta sobre su valoración acerca de la decisión del Gobierno de Canarias de elevar al Ministerio de Fomento la petición por parte del Cabildo de Lanzarote de independizarse del ente portuario provincial. Ibarra, durante la rueda de prensa celebrada tras el consejo de administración del organismo, afirmó que se acatará la decisión de Fomento "sin ningún tipo de problemas".
El máximo dirigente portuario, quien prefirió no entrar a valorar la resolución del Consejo de Gobierno de apoyar la escisión del puerto arrecifeño, dijo: "Como canario me interesaría que el puerto de Lanzarote siguiera creciendo". Asimismo, reconoció que desconocía el estudio realizado por la empresa Corporación 5 para el Ejecutivo regional y que durante la sesión de control no se trató el tema con los consejeros, entre los que se encuentran el presidente de la institución que lidera el proceso de emancipación, el Cabildo de Lanzarote, Pedro Manuel San Ginés, y el concejal del Ayuntamiento de Arrecife José Tomás Fajardo.
Ibarra se limitó a afirmar que, según los análisis realizados por los técnicos de la casa, "mantener una estructura administrativa y demás podría ser complicado" de mantener, aunque agregó que el tiempo determinará si el movimiento llevado a cabo desde Lanzarote tendrá finalmente éxito y si es económicamente viable, tal y como asegura la institución insular conejera tras la elaboración de unos estudios.
Este camino hacia la autonomía portuaria por parte de la isla de los volcanes se inició en el año 1971, cuando la administración cabildicia empezó a reivindicar tener la potestad de decidir sobre su recinto portuario. Durante los más de cuarenta años siguientes se han alentado diversos brotes, pero el proceso empezó a coger forma el pasado año cuando una declaración institucional del pleno del Cabildo, aprobada por unanimidad de los ochos grupos políticos, puso en marcha una nueva campaña a la que sólo le queda el escollo del gobierno central.
El presidente portuario declaró que a pesar de que el proceso para la independencia continúa, la Autoridad Portuaria de Las Palmas seguirá trabajando para desarrollar el puerto arrecifeño mientras esté dentro del ente público provincial. Así, destacó que en estos momentos el organismo portuario sufraga el 80% de los 19,2 millones que cuesta la prolongación del muelle de Los Mármoles, a la espera de que finalmente sea la Unión Europea quien subvencione la obra.
Otra de las actuaciones que resaltó fue la aprobación en el consejo de ayer de la orden de contratación de la red de saneamiento en el muelle comercial de recinto de la capital conejera, con un presupuesto de 655.000 euros. Estas mejoras tendrá una duración aproximada de siete meses, como indicó el presidente.
