Sin mencionar específicamente al Tribunal Constitucional y su deliberación sobre el Estatuto de Cataluña, Don Juan Carlos destacó la existencia de "instituciones claves para la estabilidad y convivencia democráticas y el buen funcionamiento del conjunto de España", y defendió que su independencia es necesaria "para el mejor y más justo ejercicio de sus responsabilidades".

"Todos debemos preservar esa independencia en aras de la confianza que los ciudadanos tienen depositadas en ellas", agregó.

La Carta Magna "garantiza un amplio abanico de derechos y libertades, fundamenta una avanzada articulación de nuestra rica diversidad territorial y nos dota de instituciones que son claves para la estabilidad y convivencia democráticas y el buen funcionamiento del conjunto de España", argumentó el jefe del Estado.