Se cuenta que en cierta ocasión Jorge Luis Borges, nacido en 1899, añadió un año a la fecha de su nacimiento. Quería pertenecer al siglo XX, de modo que ese mínimo gesto lo desalojó de golpe del siglo XIX. Idéntico procedimiento pareció emplear en su escritura, capaz de cambiar una obra de otro tocando una coma. No se libró, no obstante, de implacables críticas. Un escritor, Ramón Doll, lo vapuleó llamándolo ladrón de escrituras. Le decía que copiaba, repetía y degradaba textos de otros. Sin embargo, Borges, lejos de negar la literatura parasitaria, hizo de ella un arte propio. Concibió la repetición en literatura como un modo de crear algo diferente. Una nueva obra con su propio sello. Conocido es su relato "Pierre Menard, autor del Quijote", que cuenta la reescritura literal de la novela de Cervantes. Una coronación del arte del plagio, que sabe copiar textualmente el original, pero con un resultado distinto. Es lo que se propuso, bajo otra variante, Agustín Fernández Mallo en el libro que lleva el título "El hacedor (de Borges), 'Remake'". Reconoce que, siendo material original de "El hacedor" de Borges, y, por tanto, en un porcentaje muy alto reescritura textual, el conjunto nació a partir de lo que le sugería la lectura de "El hacedor" borgiano. Sus declaraciones responden a la denuncia presentada por María Kodama, viuda de Borges, que ha llevado a la editorial a retirar su libro de las librerías. Según Fernández Mallo, lo que se critica es "una técnica literaria que consiste en recoger un legado y transformarlo".

Si bien no he leído aún este libro del escritor español, es indudable, tal y como apunta la editorial, Alfaguara, que "si Borges no hubiera existido, Agustín Fernández Mallo jamás habría podido escribir un libro como su "Remake". Por tanto, este solo puede ser concebido como un homenaje a Borges, una recreación que preserva las marcas del maestro, ya señaladas en el propio título. ¿O acaso nos considera Kodama, tal y como habla su insólito comportamiento, lectores estúpidos incapaces de descubrir las fuentes de las que se nutren los escritores?