En las pasadas elecciones autonómicas y municipales afirmaba ante los medios de comunicación la miembra del partido popular Ce-lia Villalobos: "No entiendo cómo pueden votar a Albert Rivera, que es un niño que va con el pañalito y huele a Nenuco". Quién le iba a decir a Celia Villalobos que, probablemente, sin ese olor a Nenuco en las filas del partido popular resultará imposible que continúen gobernando sus miembros durante otros cuatro años más.

Me sorprende el saber enciclopédico que -con semejante declaración- demuestra Celia Villalobos, ya que se trata de una miembra del Partido Popular que lleva metida en política una eternidad, a pesar de tener un expediente académico equivalente a cero patatero: no hizo ni siquiera el bachiller elemental. Sin embargo, como decía Susana Ensell, mi profesora de inglés: "Ignorance is the most splendour thing", un proverbio acuñado en las aulas de la Universidad de Cambridge (por donde, evidentemente, no ha pasado la miembra del Partido Popular), que significa en román paladino algo así como la ignorancia es lo más atrevido (la traducción es mía, no de Javier Marías).