Como es sabido el sexo mueve montañas, según Freud las pulsiones relacionadas con él incluso definen gran parte de la personalidad de los humanos, manipulando y valiéndose débil se han producido todo tipo de acontecimientos, en política desde épocas pretéritas poniendo y quitando gobiernos, en economía para tejer o destruir empresas, en fin que según parece el sexo manda.

Todo esto en relación a la trifulca mantenida por la sociedad canaria en torno en como eliminar el ganado guanil de nuestros espacios protegidos, por un lado los que tienen claro que estos animales se come todo lo que crece e impide la reforestación de los espacios naturales, otros opinan que deberían seguir campando a sus anchas por el territorio como símbolo de identidad.

Pues señoras/es el sexo una vez más podría intervenir para contribuir a la solución del problema sin tiros con amor aprovechando el celo de estos animales y sus hormonas para atraerlos a diversos lugares accesibles para poder apañarlos.

El Cabildo Insular de Gran Canaria debería instar a la Facultad de Veterinaria de la ULPGC para intervenir, opinar o elaborar algún proyecto que en este sentido ayude a solucionar el problema.

Tanto hablar del compromiso de la Universidad para con la sociedad canaria, esta seria una gran oportunidad para demostrarlo, además el proyecto sería exportable a otras zonas del mundo con semejante problemática con estos animales o con cualquier otro.