El pasado 9 de septiembre el cantante Maluma actuó en el Gran Canaria Arena. Ese día escribí en mi facebook, con la libertad de expresión de la que gozo por mi condición social y por la democracia en la que vivo, lo que cito textualmente: "Los únicos discos que Maluma debería tener son los de dirección prohibida". Obviamente, como todo lo que escribo últimamente -ya sea que se me rompió el calcetín o se me quemaron las arvejas- levantó ampolla. Se insinuó que sobrevaloro a la juventud de hoy en día por la música que escucha y la verdad que nada más lejos. Y muchos fueron los que comentaron que antaño también había letras machistas. Y no lo niego, pero antaño se mataba a judíos en una cámara de gas y no por eso actualmente tenemos que hacerlo, que habrá quien fantasea con esa posibilidad, pero la realidad es que no, que no se puede, y que el dicho: "eso ya pasaba antes" me parece de australopithecus, que aquí estamos para lo que estamos: para evolucionar.

A mí, sinceramente, me importa un carajo quién escucha a Maluma, quién lo encuentre mono -con mis disculpas hacia los monos- o quién me critique por este artículo siempre que sea mayor de edad. Así que voy a dirigirme a todas y todos los adolescentes, a los que jamás he desvalorado ni juzgado por lo que escuchan.

Jóvenes futuro del país, no considero que carezcan de inteligencia por escuchar a Maluma, Nicky Jam o Bad Bunny. Solo me gustaría que fueran un poco más allá del ritmo pegadizo de las canciones y que analizaran las letras. Que sepan al compás de las atrocidades que están bailando. Que las analicen, las critiquen y ya luego, si aun así lo consideran, las bailen. Me duele que las niñas admiren a alguien que les susurra: "De los lakers siempre es la gorra/ de chingar ninguna se enzorra/ estoy metido en un lío?" ¿De verdad quieren convertirse en uno de los cuatro objetos sexuales de un hombre? ¿Quieren ser valoradas y reconocidas por eso, por el placer que reportan? ¿Ese es el tipo de persona con la que les gustaría andar el camino de la vida, formar una familia? Niños, adolescentes, chicos, ¿es ese el modelo de personaje al que quieren imitar? Un individuo que carece de valores y que no respeta a las mujeres porque solo sirven para un polvo. ¿Les gustaría que trataran así a su madre o a sus hermanas? No sé, creo que la excusa de "es solo música" cansa. Sí, es solo música, pero con un mensaje alto y claro donde la que pierde siempre es la mujer. En una sociedad donde cada vez recibimos más estímulos que solo quieren anularnos, a lo mejor es hora de revelarnos y pensar, desarrollar un sentido crítico de las cosas, forjarnos un opinión propia y, como dije antes, ya luego hagan los que les dé la gana.

En cuanto a las madres, jamás consideré que fuesen malas mamás por permitir que sus hijas fueran al concierto de ese cantante, probablemente y como así me lo hicieron saber: "solo querían cumplir el sueño de su heredera", ese es el deber de las progenitoras. Pero quizá, y sé que me estoy metiendo en la boca del lobo, como madres deberíamos sentar a nuestras hijas, contarles de dónde venimos, los abusos y las humillaciones de que fueron víctimas nuestras predecesoras, las muchas mujeres que siguen siendo víctimas del machismo y que entiendan que admirando a un hombre que dice: "tú tienes la cuenta del banco y el número de la Master Card/ tú eres mi mujer oficial/ pero tengo otra pelinegra que siempre quiere chingar", están siendo cómplices de la violencia de género, porque sí, eso es violencia de género.

Y para concluir, sé que Los Beatles, Loquillo o The Rolling Stones también tenían canciones con letras machistas en los noventa. Y en los sesenta vivíamos una dictadura, ¿volverían ahora a pedirle permiso a sus maridos para algo? ¿No, verdad? Pues lo mismo pasa con la música. Al pasado, pisado? Ahí lo dejo.