El actor estadounidense Charlie Sheen admitió ayer en una entrevista ser portador del virus del sida, una confesión pública en un espacio de máxima audiencia con la que espera recuperar la paz personal y su carrera profesional. Sheen, de 50 años, hijo del actor Martin Sheen y una de las principales figuras de la televisión estadounidense de los últimos años gracias a su papel en la teleserie Dos hombres y medio -de la que salió en 2011-, ha aparecido frecuentemente en los medios de comunicación por su vida desordenada y el abuso del alcohol y de las drogas.

Ayer fue él mismo el que compareció ante la televisión para parar una serie de rumores que se habían difundido en los últimos dos días y confirmar las sospechas: "Estoy aquí para admitir que soy VIH positivo", dijo al ser entrevistado en el espacio matinal Today de la cadena NBC.

El actor, cuyo nombre real es Carlos Irwin Estévez, neoyorquino de nacimiento y nieto de un emigrante gallego, reveló que había decidido hacer pública su condición harto de pagar "millones" de dólares a personas que han venido chantajeándolo desde hace tiempo. "Creo que me libero de esta prisión desde hoy", afirmó.

Todo empezó hace cuatro años, cuando consultó a los médicos por un fuerte dolor de cabeza y una "enloquecedora" migraña. "Pensé que era un tumor cerebral, creía que estaba acabado", afirmó el actor, divorciado en tres ocasiones y con cinco hijos.

Las pruebas posteriores le confirmaron que portaba el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), "tres letras que son duras de absorber", según dijo al referirse a las siglas de ese mal.

Sheen, que fue entrevistado en el programa matutino estrella de la cadena NBC, estuvo acompañado por el doctor que lo atiende desde hace más de cinco años, Robert Huizenga, profesor de Medicina Clínica de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). Según el médico, una vez se supo que el actor estaba infectado fue puesto bajo tratamiento y ahora sus niveles de contagio son "indetectables". "Charlie no tiene sida, está sano", insistió el médico.

Dijo que tiene que tomar cuatro pastillas diarias y realizarse pruebas cada cuatro meses, pero Huizenga también reconoció que uno de sus motivos de preocupación es el abuso del alcohol que hace el actor y cómo puede afectar al tratamiento. Señaló que las posibilidad de que transmita el mal son "increíblemente bajas", pero, aun así, Charlie Sheen dejó claro que desde que supo que tenía el virus tuvo relaciones sexuales con preservativo o con personas que estaban bajo el cuidado de su doctor.

Pero Charlie Sheen no sólo reveló el drama personal que atraviesa, sino la extorsión que ha venido sufriendo desde una fecha que no precisó de parte de personas que le sacaron millones de dólares para no revelar la noticia. Cuando se enteró de que era VIH positivo lo contó a parientes y conocidos. "Algunas personas en las que confié, de mi círculo cercano, pensé que podrían ayudar, pero resultó que me traicionaron", agregó. Pagó una cantidad de dinero "que llegó a millones", dinero que a partir de ahora deja de pagar porque ha hecho pública su condición.