La tonadillera Isabel Pantoja salió ayer de la prisión de mujeres de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) para disfrutar de seis días en libertad en el cuarto permiso ordinario que se le concede desde que el 21 de noviembre de 2014 entró a la cárcel para cumplir una pena de dos años por blanqueo de capitales.

Pantoja se santiguó y fue recogida en coche por su hermano Agustín, como ha ocurrido en las anteriores ocasiones en que la cantante ha salido de permiso penitenciario.

Este nuevo permiso ordinario se produce antes de que Instituciones Penitenciarias concrete la modalidad del tercer grado o régimen de semilibertad que le ha concedido la Audiencia de Málaga y que podría permitirle dormir en su domicilio y estar controlada telemáticamente o con su firma en un centro policial o penitenciario.

Las previsiones son que Pantoja reciba la modalidad del tercer grado que deberá cumplir antes de las fiestas navideñas, según informaron fuentes penitenciarias. La Justicia impuso a la cantante una multa de 1,14 millones de euros por los mismos hechos, multa que ya ha pagado en su totalidad.

El primero de los permisos ordinarios de Pantoja acabó el 5 de junio y el tercero concluyó el 14 de octubre.

Entre medias disfrutó de un segundo permiso ordinario que concluía el 5 de agosto, aunque un día antes ingresó en un hospital aquejada de una nefropatía diabética, donde estuvo internada 20 días antes de regresar a la prisión.

Esta enfermedad renal es responsable de cerca del 30 por ciento de los enfermos en diálisis periódica.