Después del bello espectáculo que ofreció Lovejoy justo hace ahora un año, otro cometa, Catalina C/2013 US10, nos visita en Navidad. Catalina es un cometa especial y muy interesante desde el punto de vista astronómico por varios motivos. Es un cometa nuevo, residía en la Nube de Oort (nube esférica que rodea el Sistema Solar a una distancia aproximada de un año luz del Sol) y, debido a un empujón gravitatorio producido por el paso de alguna estrella cercana, se precipitó al Sistema Solar interior. Los cálculos dinámicos indican que ha pasado por su perihelio (máximo acercamiento al sol) a gran velocidad, por tanto, escapará de la atracción solar adentrándose en el espacio interestelar. Es un vagabundo que lleva en sus entrañas información de la génesis de nuestro sistema solar. El Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) solo dispone de dos meses para intentar conocerlo.

Catalina fue descubierto el 31 de octubre de 2013 por el programa de rastreo de asteroides Catalina (Catalina Sky Survey). Se trata de un cometa con origen en la Nube de Oort y es la primera vez que nos visita. Los últimos cálculos indican que tiene una órbita hiperbólica, por tanto, solo nos visitará una vez. Catalina abandonará el Sistema Solar después de su paso por el perihelio.

La máxima aproximación de Catalina a la Tierra (perigeo) se producirá el 17 de enero de 2016 pasando a 108 millones de km (la distancia media Tierra-Sol es de 150 millones de km). La máxima aproximación al Sol se produjo el 15 de noviembre 2015 pasando a 123 millones de km.

Desde principios de diciembre el cometa es visible en el Hemisferio Norte en la madrugada. A partir de la primera semana de enero, coincidiendo con la disminución de brillo lunar (luna nueva 10 de enero), las condiciones de observación del cometa serán óptimas. El cometa será visible desde media noche hasta la salida de Sol. Lo más importante es situarse en un lugar oscuro.

Debemos disponer de una carta celeste para localizar la posición de Catalina, pues la posición en el cielo del cometa varía día a día debido a su movimiento propio orbital.

A simple vista será posible distinguir la zona central del cometa mientras que para observar detalles es recomendable usar unos pequeños prismáticos.