El Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) trabaja activamente para albergar las nuevas generaciones de telescopios que se están proyectando en el mundo y continuar así, en primera línea de la I+D+i espacial. El último paso dado en este camino es su candidatura como sede alternativa a Hawai del denominado Telescopio de Treinta Metros (TMT), uno de las dos grandes gigantes del siglo XXI, concebido por un consorcio internacional en el que participan Estados Unidos, China, Japón, India y Canadá, liderados por la Universidad de California, y que cuenta con un presupuesto de 1.400 millones de dólares.
Aunque se trata de un proyecto en el que se viene trabajando desde hace diez años, y que ya tenía sede definitiva, el tribunal de Hawai ha revocado el permiso para su construcción en los terrenos previstos. Esta situación ha permitido al Astrofísico de Canarias, concretamente al Roque de Los Muchachos en La Palma, incorporarse a la carrera por la sede de este megatelescopio, según indicó el director del IAC Rafael Rebolo.
"El consorcio tomó la decisión de instalar el TMT en Hawái, pero están teniendo algunas dificultades. La Corte Suprema de Justicia ha parado el proceso de las obras, con lo cual, aunque quieren quedarse en Hawai, han empezado a buscar sitios alternativos. Nosotros les ofrecimos La Palma, y tras visitarnos hace unas semanas, nos han incorporado como sede alternativa", indicó Rebolo.
El consorcio ha cerrado la citada lista alternativa a Hawái, con cuatro candidatos, dos en el hemisferio norte, ambos emplazamientos situados en Chile; y dos en el sur, uno en México y el otro en La Palma, en el Roque de Los Muchachos. Está previsto que el próximo mes de mayo dicha lista se reduzca a dos, y en enero del próximo año se decidirá el sitio alternativo, de forma que si continúan los problemas en Hawai, en abril de 2017, éste será designado definitivamente como sede. "En enero se sabrá si La Palma es alternativa a Hawái, aunque puede ser que nos descabalguemos antes, en la eliminatoria de mayo, pero trabajamos para estar en la final".
Como ejemplo del alcance del Telescopio de Treinta Metros, el director del IAC recordó que se trata de una de las dos grandes iniciativas mundiales del presente siglo. Una es europea, el Telescopio Europeo Extremadamente Grande (E-ELT), que se decidió ubicar en Chile; y otra es el TMT, de EEUU, China India, Japón y Canadá.
A diferencia de otros proyectos, el Telescopio de Treinta Metros ya tiene la financiación, y han empezado a construir muchos de sus sistemas en los distintos países, "por tanto este es un proyecto que se va a hacer, eso no cabe duda", apuntó Rebolo que cifró su financiación es de 1.400 millones de dólares. "La mayor parte de este dinero se gastará en la tecnología en esos países, pero la vida que espera a este telescopio es de unos 50 años, y la inversión que ellos piensan hacer al año es de 40 millones, durante 50 años, lo que supone 2.000 millones de inversión en el lugar del emplazamiento (sistemas de ingeniería, servicios...). Es un gran proyecto, no sólo desde el punto de vista científico, sino para la sociedad, es una oportunidad muy interesante para muchas empresas tecnológicas", subrayó el director del IAC.
Logros
Habrá que esperar unos meses para saber si finalmente el TMT vendrá a La Palma, pero lo que no cabe duda es que el IAC compite en las mejores ligas de la Astrofísica mundial, gracias a un plan estratégico que ha sumado logro tras logro.
Entre los más recientes, figura la selección del Observatorio del Roque de los Muchachos para acoger los 20 telescopios Cherenkov de la red CTA, en el hemisferio norte. Se trata de telescopios de nueva generación para el estudio de los rayos gamma de muy alta energía. "En estos momentos estamos en negociaciones, en fase muy avanzada, para que España invierta, de forma que tengamos tecnología propia en este tipo de telescopios, una tecnología que se desarrollará en el IAC a través del espacio de transferencia tecnológica".
Rafael Rebolo adelantó que las previsiones en torno a este proyecto es iniciar su construcción dentro de dos meses. "Estamos intentando ultimar que la financiación pueda llegar en ese plazo, y a partir de ahí hay cuatro o cinco años de trabajo. Espero que se cierre la negociación en breve, pero en cualquier caso tenemos un acuerdo con Japón que garantiza que de los telescopios del proyecto Cherenkov, los cuatro más grande los haríamos con Japón, pase lo que pase, y vamos a firmar un acuerdo con la Universidad de Tokio el próximo mes".
El siguiente gran proyecto es el Telescopio Solar Europeo, que será el más grande del mundo para estudiar el Sol. La iniciativa liderada por el IAC, que se construirá en los Observatorios de Canarias, de cuatro metros de diámetro, ha sido seleccionada recientemente como Instalación Científica Estratégica para Europa, una calificación que en la actualidad sólo ostentan 20 proyectos, y éste es el primero que lidera España.
El Telescopio Solar Europeo involucra a 29 socios y nueve instituciones colaboradoras de 15 países diferentes. "El proyecto camina bien, vamos cumpliendo fases, aunque la financiación se tiene que realizar a través de un acuerdo entre los ministerios de todos los países y esto nos va a llevar varios años de negociación. Eso no quiere decir que esté parado, está en fase de diseño avanzado, lo que pasa es que, al ser una instalación tan complicada, va a llevar dos o tres años de negociaciones en paralelo para tener la capacidad económica". En este sentido, Rebolo apuntó que el objetivo es que España, a través del Gobierno Central y el Gobierno de Canarias, financien el 25% de su construcción en el IAC; y el 75% lo pongan los socios extranjeros.
Una vez construido, el Telescopio Solar Europeo tendrá una vida de 50 años, y se sumará a las instalaciones emblemáticas de los observatorios de Canarias.
"Con ambas infraestructuras estamos garantizando que el IAC va a poder seguir haciendo ciencia puntera en muchos campos en los próximos años. Vamos a mantener al máximo nivel que podamos nuestro Gran Telescopio de Canarias, pero no nos podemos quedar fuera de las nuevas generaciones de telescopios, de forma que, manteniendo lo que tenemos, intentaremos que lo mejor que se va a hacer en el mundo venga a Canarias", concluyó el responsable del Instituto de Astrofísica, que actualmente cuenta con una plantilla de 60 investigadores fijos; 80 doctores con contratos temporales y 60 científicos que están haciendo su tesis doctoral. A ello se le suman 60 ingenieros; y personal de apoyo técnico y administrativo.
Actualmente el Instituto tiene cinco grandes líneas de investigación que van desde la Física Solar; la búsqueda de sistemas planetarios; la Física de las estrellas; la Física de las galaxias (grandes ciudades estelares, agujeros negros, fenómenos explosivos...); y el Universo de muy alta energía, "que tiene que ver con el propio origen del Universo, el Big Bang, y la producción de partículas de muy alta energía en el Universo actual, que ahí es donde juegan un papel importante los telescopios Cherenkov", indicó el astrofísico.
Además de estas cinco grandes líneas científicas, el IAC cuenta con una importante área de desarrollo instrumental y capacidades tecnológicas, donde se desarrolla la instrumentación que permite los grandes avances científicos. "Tenemos que observar el Universo, y observarlo con mejores técnicas y mayor capacidad es nuestro objetivo para entenderlo mejor".
En este terreno, el Instituto va a crear dos centros de transferencia tecnológica, espacios colaborativos con empresas, que estarán ubicados en Tenerife y en La Palma, respectivamente. "El de Tenerife va a empezar a construirse muy pronto gracias al apoyo del Cabildo de Tenerife y del Gobierno de Canarias; mientras que en el de La Palma se están cerrando los flecos entre el Cabildo de la Isla y el Gobierno Autónomo para lograr la financiación".
En definitiva, el IAC es hoy por hoy una de las infraestructuras científicas más relevantes de Europa. Registra más de 4.000 resultados cada año, publicados en las mejores revistas científicas.
En las cinco modalidades de investigación se han hecho logros de relevancia mundial. A modo de ejemplo, el IAC participó en los descubrimientos de las oscilaciones solares, abriendo un importante campo de investigación; fue pionero en demostrar que existen planetas errantes en el espacio que no están ligados a estrellas; descubrieron los primeros agujeros negros de la galaxia; así como las enanas marrones, que son objetos a mitad de camino entre estrellas y planetas, y que gracias al IAC hoy en día se sabe que hay miles de millones en la galaxia.
Son muchos los resultados de esta centro de investigación español internacionalizado y seleccionado por el Gobierno como Centro de Excelencia Severo Ochoa, que está integrado por una sede central en La Laguna (Tenerife); el Centro de Astrofísica en La Palma; el Observatorio del Teide (OT), en Izaña (Tenerife); y el Observatorio del Roque de los Muchachos en Garafía (La Palma).
