El director general de Programas Asistenciales del Servicio Canario de la Salud (SCS), Bernardo Macías, inauguró el pasado fin de semana la Reunión anual de la Sociedad Canaria del Dolor, que se celebró en el Hotel Parque de Las Palmas de Gran Canaria.

Durante su intervención, Macías aseguró que el dolor representa un importante problema de salud pública, cuyo abordaje resulta prioritario, tanto por su frecuencia, repercusión en la calidad de vida, impacto sobre los sistemas sanitarios, como por su carga socioeconómica que conlleva para los países.

"Algunos estudios han revelado que hasta un 18,7% de pacientes quirúrgicos y críticos no tenían prescripción analgésica y casi dos terceras partes de las pautas analgésicas en estos pacientes eran prescritas a demanda", destacó.

El dolor musculoesquelético provoca casi el 50% del total de bajas laborales durante, al menos tres días, en la Unión Europea, y el 60% de la incapacidad laboral permanente. Además, el dolor aparece en más del 70% de los pacientes con cáncer y lo sufren en torno al 80% de los pacientes con cáncer avanzado, siendo su abordaje y su gestión eficaz una parte importante de los cuidados paliativos.

Bernardo Macías recordó que el dolor crónico afecta a uno de cada cinco adultos en Europa y constituye un problema de salud específico, frecuentemente infravalorado o inadecuadamente tratado. Más de la mitad de los pacientes con dolor crónico lo sufren durante dos años antes de recibir tratamiento y un tercio de los pacientes están sin tratamiento contra este dolor.

Además, informó de que aproximadamente el 20% de la población adulta de Europa, más de 80 millones de personas, sufre dolor crónico, lo que representa, más de dos veces el número de pacientes con diabetes.