Nintendo Switch, la nueva consola de la compañía japonesa, salió ayer a la venta en todo el mundo en un intento por romper con el modelo tradicional al apostar por primera vez por un concepto híbrido: portátil y sobremesa al mismo tiempo. En España, muchas tiendas de electrónica abrieron ayer sus puertas con colas de clientes dispuestos a adquirir el nuevo dispositivo, que estaba en preventa desde hace meses.. "Desde que se anunció la consola, las reservas han sido constantes, con lo que hemos tenido que aprovisionar más unidades para poder satisfacer la demanda, hasta el punto de que tuvimos que cerrar la campaña de reservas el pasado miércoles", ha reconocido a Efe un portavoz de la cadena Game.

La expectación levantada por la nueva consola se debe, entre otros factores, al decepcionante volumen de ventas de su predecesora, la Nintendo Wii U, que no ha alcanzado los 15 millones de unidades, mientras que la anterior, la Wii, colocó en el mercado más de 100 millones. Su precio de venta al público es de 330 euros.