El presidente de la Audiencia de Cuentas de Canarias, Rafael Díaz, dijo ayer que en la gestión de los comedores escolares no universitarios hay ciertos defectos, de forma que en algunas contrataciones es posible que se hayan cometido responsabilidades contables, si bien el Tribunal de Cuentas no se dicho nada al respecto. Díaz habló de este modo tras presentar en comisión parlamentaria el informe de fiscalización de la financiación pública de los comedores escolares de Canarias correspondiente a los cursos 2012/13 y 2013/14.

En el informe se señala, entre otras cuestiones, que durante el curso 2012/13 se beneficiaron de este servicio 65.861 alumnos, cifra que se elevó a 66.90 en el 2013/14, y en ambos casos se cubrieron alrededor del 95% de las plazas ofertadas. Del total de comensales por curso, el 57% recibió subvenciones de la Consejería de Educación para cubrir el coste del servicio, dependiendo la cuantía percibida de la renta de su unidad familiar y de las variaciones de su situación socioeconómica.

La financiación principal provino de las aportaciones de los alumnos, seguida de las asignaciones de la Consejería de Educación destinadas a subvenciones (el 17,7% y 23,2% para cada curso, y la financiación ascen-dió a 38,3 millones de euros el primer curso y a 40,4 millones el segundo. Rafael Díaz explicó que la Consejería de Educación libró parte de la asignación para subvenciones con cargo al capítulo 2 de su presupuesto de gastos, cuando estas debieron imputarse al capítulo 4, ya que su finalidad no consistía en atender gastos de funcionamiento del comedor.

La gestión de comedores se repartió entre directa y contratada, siendo superior, tanto en número de comedores como de comensales, el segundo tipo, y la diferencia es que en la primera los centros asumen el funcionamiento del comedor, y en la segunda los menús los provee una empresa. La Audiencia de Cuentas reconoce que no puede determinarse cuál de las gestiones es más eficiente, al depender de las características del centro escolar, y tampoco se puede concluir cuál es más económica, al no existir una contabilidad de costes del servicio homogénea entre los centros.

Precisamente, los profesionales del servicio están llamados hoy a una huelga por parte de los sindicatos que alertan de la "privatización" que sufren los comedores escolares del sistema público educativo de Canarias. Por este motivo, además del paro que amenaza sin dejar sin el servicio a los estudiantes isleños, los trabajadores celebrarán concentraciones y manifestaciones tanto en Tenerife como en Gran Canaria.

Al respecto, la Consejería de Educación aseguró ayer que no existe esta privatización y argumentó que "no se ha trasladado ningún comedor de gestión directa a catering", además de garantizar el puesto a los profesionales que trabajan colegios que, en función de la decisión de sus consejos escolares, han solicitado que el personal que atiende el servicio sea aportado por el catering contratado.