La compañía aérea Spanair vivió ayer un nuevo sobresalto, tras el trágico y reciente accidente en el aeropuerto de Madrid-Barajas, cuando un avión de las mismas características que el siniestrado en la capital de España tuvo que regresar ayer a Gran Canaria, sobre las 17.00 horas, cuando también iba a Madrid.

El vuelo JK 5025, con 127 pasajeros a bordo, volvió a Gran Canaria después de que el piloto detectase una avería, unos 40 minutos después del despegue.

Según fuentes de Spanair, los 127 pasajeros aterrizaron en la isla "con total normalidad", y 91 fueron distribuidos en dos vuelos de Spanair y uno de Iberia en dirección a Madrid, mientras que otros 36 decidieron quedarse en tierra y partirán hoy.

Azahara Fuentes, natural de Sabiñánigo (Huesca) y estudiante de Ingeniería Industrial en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, era una de las pasajeras del referido vuelo.

La joven universitaria indicaba que "el avión empezó a hacer un poquito de ruido, pero siguió su ruta y la gente estaba muy tranquila, escuchando música... De repente, dicen por el altavoz que regresábamos a Las Palmas, por un problema técnico que no era nada grave, aunque por seguridad volvíamos a la isla".

Azahara Fuentes se mostraba muy molesta porque "al llegar aquí la gente de Spanair, en vez de organizar los vuelos y preguntar quién iba a La Coruña, a Valencia, a Málaga, etc, empezó preguntando quién tenía plaza en clase preferente; luego nos llamaban por el número de la tarjeta de embarque, después por el nombre, y había un cachondeo tremendo".

Por ello, Azahara comentó: "Hubo pasajeros que se debieron quedar aquí, otros que teníamos que enlazar con otros vuelos dormiremos en Madrid, y algunos tendrán que quedarse 'colgados' unos días en Madrid".

Azahara Fuentes afirmó que, tras comunicarse el regreso al aeropuerto grancanario, "había niños pequeños y adultos llorando; otros no hablaban, y también había quien hacía bromas para intentar suavizar la situación".

Cuando el avión aterrizó, el comandante dijo algo así, según Azahara, como "ya estamos aquí gracias a Dios, como señalando de menuda nos libramos".

Según esta joven, "parece que el problema lo ocasionó un aerogenerador (generador eléctrico movido por una turbina eólica accionada por el viento), que se estropeó, y aunque el aparato podía volar sin este aerogenerador, según dijeron, por nuestra seguridad regresamos".