Un total de 106 kilos de cocaína, distribuidos en dos bolsas, fueron descubiertos en el interior de un contenedor a bordo de un barco en tránsito en el puerto de La Luz y de Las Palmas durante un control aduanero que se realizaba en el mismo. No se habían producido detenciones hasta última hora de ayer, aunque la investigación continúa abierta en esta operación desarrollada por los agentes entre el domingo y ayer lunes, según indicaron fuentes próximas al caso consultadas anoche por este periódico.

El buque portacontenedores se encontraba en escala de tránsito en el puerto de la capital grancanaria, ya que procedía de Brasil y su destino era el continente africano. El barco estaba ayer atracado con la finalidad de que los funcionarios continuasen la investigación en relación a la droga descubierta en el contenedor.

Los agentes del servicio cinológico de la Guardia Civil, con los perros adiestrados para descubrir estupefacientes, intervinieron en el barco, así como también miembros del destacamento fiscal del Puerto del instituto armado y de la dirección adjunta de vigilancia aduanera (DAVA).

Este nuevo caso de incautación de un importante alijo de cocaína en las instalaciones portuarias de Las Palmas de Gran Canaria se suma a otros destacados servicios realizados en La Luz por los cuerpos de estatales de seguridad y de Aduanas, como el ocurrido hace un año.

El juzgado capitalino de Instrucción número 3 envió a prisión en enero de 2013 a los seis supuestos miembros de una red internacional de tráfico de droga que intentaban introducir 40 kilos de cocaína procedente de Ecuador. Cuatro de los encarcelados trabajaban en la Sociedad Anónima de Gestión de Estibadores Portuarios (Sagep).

La organización criminal, de origen colombiano, utilizó en ese caso el sistema conocido como el del gancho ciego para tratar de meter estupefacientes en Gran Canaria. Se trata de una técnica empleada principalmente por los cárteles sudamericanos, quienes colocan la droga en un contenedor junto con mercancía legal, todo sin que la empresa transportadora conozca el contenido de la mercancía ilícita. Después, una vez que el contenedor haya arribado al puerto, los miembros de la misma organización se encargaban de sacar el alijo y de volver a colocar los precintos para eliminar cualquier sospecha.