El Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (E.D.O.A.) de la Guardia Civil y el equipo de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en Canarias, apoyados con miembros del Destacamento de Seguridad del Puerto de La Luz, en el marco de la "Operación Paparina II", procedieron durante el mes de noviembre a la detención de once personas, siendo investigadas tres más, 8 de nacionalidad extranjera y 3 de nacionalidad española, como presuntos autores de varios delitos contra la salud pública, blanqueo de capitales y asociación ilícita, todo derivado presuntamente del cultivo y venta de marihuana

Inicio de la investigación

La operación fue iniciada tras el desmantelamiento durante el pasado mes de octubre, del pasado año, de un invernadero que presentaba más de 130 plantas de marihuana en el interior de un domicilio, descubriéndose a través de la documentación hallada que, aparte de la venta al menudeo del inquilino de la vivienda, la mayor parte de la cosecha era destinada a la venta a determinadas asociaciones cannábicas ubicadas en la capital grancanaria.

Colaboraciones y "turismo cannábico"

Ese descubrimiento, junto a los trabajos operativos realizados, informaciones recibidas de otras administraciones y de personas relacionadas con la trama, varias denuncias administrativas al artículo 36 -apartado 16- de la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, el apoyo prestado por parte de la Policía Local de Agüimes, la Unidad de Helicópteros y Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, permitió sacar a la luz un nuevo tipo de negocio ilícito practicado por la trama: el denominado "turismo cannábico".

Presuntamente, y bajo el amparo de la doctrina del consumo compartido, las asociaciones intervenidas ofrecían a través de varias redes sociales paquetes de viajes a Canarias donde se incluía el consumo de marihuana.

Asociación ilícita y blanqueo de capitales

Además estas asociaciones, sin aparente ánimo de lucro, se inscribían ante el Gobierno de Canarias para obtener presuntamente, a través de una actividad generada de manera encubierta, importantes beneficios económicos, ya que cobraban una determinada cantidad de dinero de forma anual y cobraban aparte el consumo de la marihuana.

Fase de explotación

Durante la fase de explotación de la operación, supervisada por el Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria, se realizaron un total de 11 detenciones, efectuándose a su vez 10 entradas y registros en diferentes zonas de Gran Canaria, llevados a cabo en domicilios, fincas y locales, en los que se intervino distinta documentación que consiguió relacionar la actividad asociativa que pretendían ocultar, siendo incautados un total de 6 kilogramos de marihuana lista para consumir, una cantidad en metálico cercana a los 4.000 euros, así como diverso material informático, y abundante documentación relacionada con sociedades mercantiles, siendo descubierto también la preinstalación de un gran invernadero en los bajos de un edificio de viviendas, ubicado en el municipio de Las Palmas de Gran Canaria.

Trabajadores sin contrato

Durante esa fase final también se contó con la colaboración de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social del Gobierno de España y del Servicio de Ordenación Farmacéutica del Gobierno de Canarias, al conocerse que además de los presuntos delitos cometidos por la trama, ésta disponía de trabajadores sin estar dados de alta en la seguridad social, ofertando además productos para la venta y consumo relacionados con la marihuana -lámparas, cremas derivadas de la sustancia descrita, etc.- careciendo de la autorización administrativa correspondiente.