Doce personas han sido detenidas en Pamplona desde el inicio de los sanfermines acusadas de delitos sexuales, seis de ellas por abusos y otras seis por agresiones, mientras crece la indignación ciudadana ante los hechos denunciados, de los que hoy se han conocido dos casos más.

Además de cuatro agresiones sexuales, según la información facilitada ayer por la Junta Local de Seguridad, de la que forman parte los diferentes cuerpos policiales, el Ayuntamiento de Pamplona y el Gobierno de Navarra, se han presentado siete denuncias por abusos y otra por un intento de agresión.

En la noche del día 7 hubo una concentración multitudinaria en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona horas después de que una joven madrileña sufriera la primera agresión sexual denunciada estos sanfermines, suce- so por el que cinco sevillanos de entre 25 y 28 años están ya en prisión.

"Pamplona no es una ciudad sin ley", ha dicho la consejera portavoz del Ejecutivo, Ana Ollo, y ha criticado casos como el de una agencia turística que "vendía Pamplona como la ciudad en la que puedes beber, bailar y besar a quien quieras".

Para Ollo, este es el tipo de discurso que se debe combatir pero "no hay motivos para la alarma", y es que la existencia de "más casos de denuncias" que en otras ocasiones puede deberse a la sensibilidad que provocó la denuncia del día 7, que ha hecho que en estos sanfermines se estén conociendo "casos que otros años se dejaban pasar o no se consideraban".

La sociedad está "inmersa en el discurso de la tolerancia cero. Las mujeres tenemos derecho a participar en la fiesta al igual que los hombres", ha insistido la consejera, y ha añadido en este sentido que cada vez se admite menos "cualquier tipo de acoso y agresión". Por su parte, la Junta Local de Seguridad ha puesto en valor "el alto grado de eficacia que están demostrando" los diferentes cuerpos policiales a la hora de actuar frente a las agresiones y los abusos sexuales y "el gran nivel de coordinación que existe" entre ellos.

Como prueba, la denuncia de una violación colectiva a las tres de la madrugada del día 7 y que conllevó la detención poco después de las ocho de la mañana de los cinco sospechosos en una operación conjunta de Policía Municipal y Foral.

En espera de los datos que aporte la instrucción de este ca- so, de momento ya hoy uno de ellos, A.M.G.E., agente de la Guardia Civil, ha sido suspendido en sus funciones y revocado su des-tino, mientras que desde el Mi-nisterio de Defensa han declinado por el momento facilitar información sobre la pertenencia al Ejército de otro de los acusados al haber un procedimiento judicial de por medio.