La patrullera Río Tambre de la Guardia Civil localizó a dos submarinistas que realizaban una pesca furtiva tras fondear con una lancha neumática en aguas de la zona de exclusión militar de la Base Aérea de Gando, en Gran Canaria, cuya franja está catalogada de Interés para la Defensa Nacional. Los dos pescadores habían capturado siete kilos de viejas y dos de pulpos, pese a las prohibiciones. Además, carecían de licencia de pesca submarina recreativa.

La Guardia Civil apunta que los denunciados tenían el permiso de navegación de la embarcación semirrígida caducada, y tampoco estaba en vigor el seguro de responsabilidad civil.

Los pescadores, que llevaban trajes de neopreno y enseres de pesca submarina cuando fueron localizados, se enfrentan a una serie de denuncias administrativas.

La patrullera de la Benemérita trasladó a ambos y a su embarcación al puerto pesquero de Taliarte, en Telde.