La iglesia de Clavellinas acogió ayer una amalgama de dolor y solidaridad por José Francisco Santana Álvarez, el agente forestal fallecido la pasada semana en el incendio de La Palma. Una multitudinaria asistencia a la misa funeral celebrada en templo que abarca las playas de Salinetas y Melenara dio el último adiós a Fran Santana después de que el pasado viernes sus restos mortales fuesen incinerados en la intimidad en La Palma, su lugar de residencia y trabajo en los últimos 12 años.

Esa intimidad se transformó en el templo teldense en una gran demostración del cariño y aprecio que Fran se granjeó entre quienes lo conocieron y que ayer recordaban su bonhomía, su magisterio como iniciador de muchos hoy ecologistas en la defensa de la naturaleza. En una iglesia atestada de familiares y amigos y donde no faltó tampoco la representación del Ayuntamiento de Telde por medio de la presencia de la alcaldesa accidental, Celeste López, y la consejera insular de Turismo, Inés Jiménez, entre otros asistentes, la figura y obra del agente de Medio Ambiente víctima del fuego de La Palma volvió a ser admirada.

Deja un legado que se quiere perpetuar en la costa de Telde con la propuesta de poner su nombre a la zona de deportes aeróbicos ubicados cerca de los pinos marinos y del merendero de Melenara. Una propuesta aún en ciernes, pero que sus promotores quieren que no se quede en el olvido.

La cantidad de asistentes al funeral era difícil de cuantificar, se habla de más de 500 personas, pero algunos presentes consideraron que incluso había más. Como muestra de ello, el aparcamiento de Melenara, usado para los días con más afluencia de bañistas, se quedó pequeña, según una de las vecinas de la zona.

Al término de la función religiosa, sobre las nueve de la noche, la plaza de Clavellinas presentaba un impresionante aspecto a la salida, donde muchos de los presentes conversaban sobre Fran Santana y el incendio de La Palma, que aunque se está rematando por los efectivos sus últimos efectos, desde el Gobierno de Canarias se mantiene la alerta máxima por las fuertes temperaturas existentes.

Por otra parte, el dispositivo terrestre encargado de la extinción del incendio forestal de La Palma trabaja en las labores de vigilancia de los últimos brotes de un fuego considerado uno de los más graves ocurrido en la isla y uno de los que más medios ha desplegado en Canarias. Durante la jornada de ayer más de un centenar de efectivos terrestres continuaban con los trabajos de extinción. Además, a lo largo de la mañana dos helicópteros sobrevolaron la superficie afectada, uno de ellos realizando descargas puntuales en los puntos donde se han detectado rebrotes, mientras que el segundo comprobaba que el perímetro del incendio continúa estabilizado.

El Gobierno de Canarias ha informado de que los recursos aéreos que han permanecido en la isla a lo largo de la mañana para la extinción del incendio se concretan en dos helicópteros del GES (el de La Palma y El Hierro) y dos de la BRIF La Palma del Ministerio, mientras que el resto de medios aéreos se encuentran en situación de preaviso en sus respectivas bases por si fueran necesarios.

La consejera de Sostenibilidad del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, recordó ayer que el incendio de La Palma "está estabilizado pero no controlado", al mismo tiempo que insiste a la ciudadanía en que hay que extremar las precauciones durante los próximos días ante la situación meteorológica adversa que se presenta, con una subida de las temperaturas máximas, según informó Efe.