Dos varones extranjeros fallecieron durante el día de ayer miércoles, uno de ellos en una piscina natural, por un golpe de mar, en el municipio de Haría, en Lanzarote, y el otro en una playa de la capital tinerfeña. El primer bañista tenía unos 50 años y era de nacionalidad belga, al tiempo que el otro, colombiano, contaba con unos 30 años.

El primer trágico suceso ocurrió en torno a las 12.20 horas en las piscinas naturales de Charco de Palo, en la zona conocida como Los Alemanes en Haría, como se alertó al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes)-112.

Dos ambulancias del Servicio de Urgencias Canario (SUC) se desplazaron a la piscina natural, así como agentes de la Policía Local y la Guardia Civil, y Bomberos del Consorcio, después de que se alertase al Cecoes-112 de que había un hombre flotando, tras sufrir un golpe de mar mientras se bañaba.

Los Bomberos del Consorcio fueron lo que recuperaron al bañista sin vida, el cual había llegado de vacaciones a la Isla el martes.

El personal del SUC confirmó el óbito del turista, al tiempo que atendía a otro hombre de 63 años.

Tras ver lo ocurrido, el otro hombre, de 63 años, que acudió en su ayuda y sufrió heridas leves, por las que fue trasladado después al Hospital Doctor José Molina.

Los miembros del instituto armado custodiaron el cuerpo sin vida hasta la llegada de la autoridad judicial y la orden de levantamiento del cadáver, e instruyeron las diligencias correspondientes.

Después, sobre las 17.30 horas, el Cecoes-112 recibió el alerta de que unos bañistas habían rescatado del agua a un varón con signos de ahogamiento y que le estaban realizando las maniobras de reanimación en la playa de Almáciga, en Santa Cruz de Tenerife.

La víctima, de unos 30 años, de nacionalidad colombiana se hallaba en el agua y se encontraba en apuros por lo que dos mujeres jóvenes se lanzaron al mar con intención de ayudarle a salir. Sin embargo, los tres tuvieron que ser rescatados por los vecinos quienes alertaron de lo sucedido al SUC que envió una ambulancia a la zona. El personal sanitario atendió a las mujeres de una crisis de ansiedad, mientras que el helicóptero forestal trasladó al hombre hasta aeropuerto de Los Rodeos, donde el médico certificó el óbito. En el servicio colaboró la Unidad de Montes del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, así como la Policía Nacional que se hizo cargo de las diligencias.