Tres días tardaron los agentes del Grupo de Criminalística de la Guardia Civil en desenterrar el cadáver del hombre que fue hallado el pasado domingo, en un solar de Amarilla Golf, en el municipio tinerfeño de San Miguel de Abona.

El cuerpo se encontraba sepultado debajo de escombros, piedras y tierra y los investigadores, desplazados desde Madrid los cuales llevan el peso de las diligencias en apoyo del personal del Equipo de Policía Judicial de la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife, han tratado de deteriorar y contaminar la zona lo menos posible, todo ello con el fin de no destruir las pruebas que puedan permitir el esclarecimiento de esta muerte y detención del autor o autores.

El cadáver fue conducido hasta el Instituto de Medicina Legal para la práctica de la preceptiva autopsia y de esta manera poder determinar las causas reales del óbito. Las primeras líneas de investigación apuntan a que el cuerpo localizado podría corresponder a V. A. M. G., de 35 años, que desapareció en Granadilla de Abona el pasado día 8 de febrero, sobre las 15:45 horas. El desaparecido medía un metro noventa aproximadamente, su complexión era gruesa y tenía una calvicie parcial. Vestía un pantalón de color azul oscuro y una camiseta de color negro.

Según sus familiares solía acudir con cierta frecuencia a San Isidro y a la zona de Golf del Sur, donde trabajaba en un taller de mecánica. El cuerpo fue encontrado el domingo después de que una persona alertara del fuerte olor a descomposición que se registraba en la zona.

El testigo avisó de que entre la masa de tierra sobresalía un poco la cabeza por lo que desistió de indagar y poner los hechos en conocimiento de la Guardia Civil. Ahora espera un largo camino a los investigadores. Por un lado, averiguar cuál fue el móvil para que decidieran acabar con la vida de esta persona. Segundo, reconstruir las últimas horas de vida, para lo cual será fundamental hacer un seguimiento al móvil y tercero, indagar entre su círculo más próximo para determinar si recibió amenazas en algún momento. El caso recayó en el Juzgado de Instrucción nº 2 de Granadilla de Abona que se encontraba en funciones de guardia el día en que se descubrió el cuerpo sin vida. El titular del mismo ha decretado el secreto de las actuaciones policiales y judiciales.