Una barrera electrónica y un lector de matrículas para evitar el intrusismo de taxis no autorizados en el aeropuerto de Gran Canaria, recinto que comparten los municipios de Telde e Ingenio. Ésta es una de las medidas que han acordado el Cabildo de Gran Canaria y el ente estatal Aeropuertos y Navegación Aérea (AENA) para atender las demandas de los taxistas de ambas localidades por la recogida de viajeros después de la aprobación del aeródromo como Área Sensible, que ha posibilitado que profesionales del transporte del resto de la Isla operen en Gando.
El consejero de Transportes y Movilidad del Cabildo, Juan Francisco Trujillo, y el director del Aeropuerto, Alberto Martín, acordaron la colocación de una barrera electrónica y un lector de matrículas que detectará los taxis que tienen autorización previa del Cabildo y autorizará la entrada a la zona de recogida de viajeros.
Esta medida se adopta de acuerdo al reglamento regulador de las Áreas Sensibles de Gran Canaria, que exige determinados requisitos para recoger pasajeros tanto en el Aeropuerto como en los puertos de La Luz y Agaete. Según Trujillo, "el objetivo es evitar el intrusismo y mantener la calidad del servicio".
Otro acuerdo fue el de iniciar, en el próximo semestre, una reordenación de los servicios de transporte que operan en Gando que remodelará los estacionamientos que ocupan taxis, coches de alquiler con conductor, microbuses, las guaguas de transporte discrecional y las de Global. Los taxis se trasladarán a un espacio más amplio, los microbuses seguirán donde están y Global cambiará de parada.
