Las gallináceas que viven en el parque urbano de San Juan cambian de residencia, aunque no se alejan demasiado de su actual hogar. La concejalía de Parques y Jardines, dirigida por Álvaro Monzón, ha iniciado los trabajos para el traslado de estas aves, en torno a una docena, a un lugar más apropiado y cómodo para ellas y el elegido es la zona hasta no hace mucho ocupada por los dos avestruces. Al morir una de ellas, el otro ejemplar fue trasladado. "En la nueva ubicación", según expuso el edil, "tendrá más sol, podrán moverse con más espacio y, además, contarán incluso con un pequeño lago". La concejalía planea ahora qué hacer con el espacio ocupado por las gallináceas. Informa: P. H.