¿Qué pasaría si todas las mujeres del mundo de la política, independientemente del partido al que representan, se uniesen para luchar por la igualdad y sus intereses? Esta cuestión fue una de las planteadas durante el debate El papel de la mujer en política que cerró el primer Womenhub en el Club Internacional de Empresarios y Emprendedores en Telde. Esta primera semana de la mujer emprendedora culminó con la experiencia de siete féminas que han sufrido en primera persona pertenecer al género femenino y tener como profesión la política. Siete partidos, o partidazos, que se cogieron de la mano para ir en una misma dirección, esa que divisa la igualdad.
La sede del Club en San Gregorio, de paredes blancas y clima tranquilo, se convirtió en un espacio de puestos variados. Productos de belleza, alimentos dietéticos, ropa y complementos, decoración, imprenta o artesanía. Cada uno de ellos bien colocados, con afán de enseñar y formar y, detrás, sus mujeres emprendedoras atendiendo a los curiosos con ganas y pasión. Tras cada stand, un alma emprendedora con ganas de mostrar que no es tan difícil crear un negocio, dejar de depender y salir adelante.
De esta manera, las féminas contaban su experiencia, sus inicios, la dificultad para muchas para seguir y la satisfacción tras lo conseguido. Poco a poco, abandonaron sus espacios para dirigirse a la zona habilitada para la tertulia, una veintena de sillas azules frente a siete negras y una roja. Acto seguido, Juana González, responsable de marketing y RRPP de la agencia de comunicación Medios & Producciones, comenzó su papel como moderadora del debate. Mientras, las siete mujeres protagonistas ocuparon sus puestos haciendo un semicírculo frente al público, formado por un grupo de hombres y mujeres expectantes y participativos.
Mercedes Roldós, senadora del PP; Guacimara Medina, candidata del PSOE al Congreso; Ana Santana, candidata por Ciudadanos al Congreso; Isabel Guerra, alcaldesa de Teror por Nueva Canaria; Conchi Monzón, diputada regional por Podemos; Ángeles Batista, concejala y portavoz del grupo municipal del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria con Unidos por Gran Canaria, y Beatriz Calzada, gestora de Coalición Canaria en la capital. Siete voces alzadas, con argumentos y puntos de vista diferentes pero llegando a un mismo punto común.
Todas critican la dificultad de la mujer en este mundo frente al hombre. Cuentan como las cuotas de poder han sido necesarias para el avance de la figura femenina en política, con el fin de los partidos de cumplir con una representación equitativa de géneros, y no incluyendo por "valía y preparación" en muchos casos. "Las mujeres estamos muy bien preparadas", aseguran, mientras destacan su capacidad "multifunción" pero lo poco valoradas que están en esta área.
Señalan la desventaja de este colectivo por la "carga familiar", asegurando que mientras el hombre lo tiene más fácil, ellas tienen que compaginar su agenda profesional y política con la casa y los niños. Hablan de la necesidad de acabar con las diferencias y lo fundamental que es inculcarlo desde edades tempranas en la educación. Así como creen imprescindible la formación de los varones que, muchas veces, no son conscientes de esta realidad "injusta" que padecen.
"La igualdad no es real. Esto tiene que cambiar y está cambiando", afirman. Pero, por el momento, "de 21 municipios en la Isla de Gran Canaria sólo hay cuatro alcaldesas gobernando actualmente", añaden.
