El titán amarillo que chocó con la leyenda. El mallorquín Pedro Bigas, defensa de la UD, desveló, diez días después de ser protagonista por el encontronazo con Messi -baja para las próximas 7 semanas por un esguince en la rodilla- que no habló con la Pulga "porque se iba al hospital" y que se percató de que la gravedad de la acción involuntaria "al ver 300 llamadas perdidas en el móvil".
Bigas declaró que "tuve intención de hablar con él pero se fue al hospital; no pude. No me gusta este tipo de situaciones, no fue a propósito. Él no salió beneficiado y me di cuenta después, cuando tenía 300 llamadas perdidas en el móvil. En realidad en la misma jugada, no le doy porque voy a por el balón. Se trata de un contrapié, al poner la pierna llegó el impacto y se produce la lesión. Es mala suerte y ya está, no le quiero dar más bombo".
Insiste que quiere olvidar aquella acción del Barça-UD del pasado 26 de septiembre (minuto 10), en la disputa de la 6ª jornada de la competición y que terminó (2-1) para los azulgranas. "Me gustaría más que se hablase de eso -de su acción defensiva en la que acude veloz al corte-; pero ya está, solo desearle la más pronta recuperación y centrarnos en el partido ante el Getafe".
Volver a empezar
Valora de forma positiva el parón para encarar con más preparación el duelo ante el Getafe. Dos semanas para formatear el disco duro y empezar de cero. "Vendrá bien, hicimos un partido que no queríamos ante el Eibar. Ellos salieron con intensidad, y a nivel defensivo no estuvimos como otros partidos. No supimos acertar ante la meta rival. Ahora tratamos de desconectar en estas dos semanas de trabajo y tratar de cambiar la dinámica con el objetivo de conseguir los tres puntos que es lo más importante".
Resta importancia a estar ubicados en la penúltima plaza: "Ganas dos partidos consecutivos y te pones en la zona alta. Hay que trabajar para ello; sacar los tres puntos y desde la tranquilidad hacer las cosas bien". Confía en esta plantilla: "Hay calidad para lograr la salvación".
