Un grupo de aficionados con movilidad reducida de la UD Las Palmas ha puesto el grito en el cielo. Denuncian que no pueden ver los partidos con comodidad y piden más alternativas. El Cabildo de Gran Canaria, propietario del Estadio, tiene sobre la mesa una propuesta del club, consensuada con los aficionados afectados, desde hace varias semanas. Y esa propuesta "es factible", señala Antonio Pérez, director técnico del Instituto Insular de Deportes. "Es viable pero hay que estudiarla para ejecutarla", explica.
Se trata de habilitar más zonas en el recinto para personas con movilidad reducida, tanto a ras de césped como a media altura en las gradas, donde habría que crear plataformas que faciliten la visión. De momento, hasta que esa reforma llegue, los aficionados amarillos se sienten "escoria", según explica Eliseo González, uno de los afectados. "No son sitios óptimos porque cuando los aficionados de delante se levantan por alguna ocasión o algún gol nos interrumpen la visión del campo. No podemos disfrutar", indica. De ahí la propuesta de habilitar una tarima y que, además, sus acompañantes puedan estar en la fila de delante.
Esta situación vivió su capítulo más desagradable en el partido del sábado en la grada Sur, el primero de la temporada en el que la Sur funcionaba con normalidad. Un aficionado en silla de ruedas se situó junto al asiento en el que tiene su abono, pero se encontraba junto a las escaleras de evacuación. Por ello, agentes de la Policía Nacional le indicaron que ahí no podía estar. "Todo se hace para preservar la seguridad de todos los aficionados pero a veces no se interpreta de esa manera", explica José Reyes, director de seguridad de la UD Las Palmas.
El aficionado afectado cambió a una ubicación de peor visión a la que tenía contratada entre las quejas de los seguidores que había a su alrededor. Antes de que acabara el encuentro, al sentirse "humillado", decidió abandonar el recinto. "El club ha pedido disculpas al aficionado pero todos tenemos que acatar las órdenes de los cuerpos de seguridad", explica Patricio Viñayo, director general de la UD.
"No sabemos dónde nos tendremos que poner en el partido del jueves", afirma Eliseo González ya que nos les permitieron estar en la primera fila de la grada Sur. Desde el inicio de esta temporada hay un espacio en Tribuna, en la planta 6, abierto para los aficionados en silla de ruedas.
Sin embargo, consideran que las opciones son insuficiente y que además allí "hay una corriente de frío impresionante". La delicada situación, que implica a muchas partes, está sobre la mesa.
