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Bigas y la maldición eterna

La lesión del balear, con la rodilla afectada, se suma a las de Ángel, Wakaso, Simón, Alcaraz y David García

El marcador central balear Pedro Bigas, anoche, en el momento de ser retirado, ante el rival Carlos Martínez. QUIQUE CURBELO

Bigas, el último pasajero. La crueldad de un carrusel diabólico sin fin.

El marcador central balear, la mejor pieza de la UD en este arranque de temporada, sufrió ayer una lesión de rodilla -a la media hora de juego- que ha disparado todas las alarmas. Según las primeras exploraciones, tiene la cara interna de la rodilla izquierda afectada y esta mañana será examinado. El percance lo deja 'ko' para el próximo duelo liguero ante el Sporting de Gijón en El Molinón, de este domingo (17.15), y podría tener afectado el ligamento.

Visiblemente dolorido, y bajo un manto de lágrimas, Bigas se lastimó a la media hora de juego tras un encontronazo con Chory Castro. A falta de más exámenes, las primeras informaciones son pesimistas. En ese maldito minuto 30, se hizo el silencio. La enfermería amarilla está desbordada. Wakaso Antolín Alcaraz, Ángel López, David García, David Simón, Wakaso están de baja. En el caso del lateral derecho (con una lumbalgia) aún no está descartado y se esperará a la jornada de mañana. Nabil El Zhar o Nili, que ayer debutó en Copa, son las opciones para el carril diestro. Pero aún hay más: Aythami Artiles -que estaba sancionado- también tiene molestias. La odisea de Quique Setién.

De Maspalomas al Calderón

Con el ex del Mallorca ya son seis los defensas lesionados. Con la recuperación de Aythami Artiles, la muralla de hormigón armado de la UD podría estar compuesta Nabil El Zhar, el citado Aythami, Garrido o Hernán y Dani Castellano .Vicente también probó ayer como marcador central y lo hizo con nota.

La maldición de la enfermería se inició el 25 de julio en el Campo de Golf de Maspalomas cuando el lateral diestro Ángel López se retiró con la rodilla derecha dañada. Con una rotura de menisco, tuvo que pasar por el quirófano. El lunes ya regresa con el grupo, tras permanecer cinco meses en el dique seco. El segundo capítulo de este drama llegó solo un mes después. El 28 de agosto, tras la primera jornada ante el Atlético de Madrid en el Calderón, una vez concluido el choque, Javi Castellano se retiraba con dolor en la rodilla. Tras las primeras exploraciones, decía adiós al curso. Con una lesión osteocondral en el cóndilo externo del fémur izquierdo y el menisco externo dañado, fue intervenido en Barcelona. En mayo tendrá el alta médica. El timonero eterno, el GPS amarillo, caía en las redes de esta maldición despiadada.

El tercer inquilino fue Antolín Alcaraz. El central paraguayo encadena siete jornadas lejos de los terrenos de juego. Una microrrotura en el gemelo tras medirse al Barça en el Camp Nou fue el principio del fin. Ese 26 de septiembre figura como su última participación. El lunes se pone a las órdenes del técnico y ve la luz tras un calvario de más de dos meses. Wakaso -con una rotura- y David García -una contusión en la cadera- cayeron esta semana en el frente. Con el interrogante de Simón, Bigas completa esta lista macabra que fuerza un experimento en un duelo crucial en Gijón.

El defensa mallorquín ha completado todos los minutos de Liga en las primeras 13 jornadas (1170')

y en Copa solo resistió 30 minutos. Un total de 1200 para elevar a los altares a un mimbre de acero. Ahora padece el lado más cruel de un terremoto despiadado. "Es un chico genial, se merece todo lo mejor. Ojalá todo termine bien y nos pueda dar una buena noticia", determinaba Valerón a la emisora oficial al término de la batalla. Siete gladiadores señalados en rojo en este infierno.

En la venganza de Asdrúbal, que pasa de invisible a héroe, Setién agita su pizarra mágica para dar con una fórmula defensiva coherente. Garrido, Hernán y Vicente parten como los firmes candidatos ante las bajas de Ángel López, Alcaraz, Bigas, David García y la incógnita de Simón. Incluso el extremo Nabil puede jugar como lateral diestro. Todo vale para poner fin a este calvario.

Los amarillos tocan y respiran al son de Vicente Gómez. Ayer, entró en el segundo acto dio un recital como central. Se entregó en el barro, igual que Hernán, que de cabeza, logró el segundo gol amarillo. E incluso Roque, como lateral diestro, cumplió con orden y rigor ante la Real.

Inventar para sobrevivir. La competición no da tregua y castiga el corazón de los zagueros de Setién. Una cacería sangrienta directa al alma de un proyecto marcado por el infortunio. Tras 14 duelos oficiales, vibran tres triunfos, uno ante el Sevilla y dos ante el once donostiarra -en la competición doméstica y Copa-. Toca levantarse y apelar al espíritu del búfalo Asdrúbal, un pistolero incansable que jamás cae en el desaliento. Con Valerón como emperador de magia, la UD se reinventa en cada segundo. Ante la lluvia de lesiones y contratiempos, el Flaco dispara su categoría de leyenda. Un mito eterno que marca el camino hacia el paraíso. De Ángel a Bigas, los amarillos son víctimas de un vudú. A la espera del primer diagnóstico, la rodilla del balear es la última casilla de un juego de la oca diabólico. El más difícil todavía. Tomar El Molinón y congelar la maldición. Reto para héroes en un juego de crueldad sin límites.

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